de que las vacaciones están llegando a su fin, es ver esta imagen por las carreteras de la Costa del Sol
Es curiosa la tristeza que me entra cuando veo estos coches tan cargados, como si en sus bacas quisieran transportar el mundo que dejan atrás.
A primeros de verano tuvo lugar la misma escena, pero en sentido inverso, hacia el Estrecho,
seguro que en aquel viaje la carga les resultó menos pesada.
Cuando salen llevan todo un año de trabajo a cuestas para repartir al llegar, sueños, regalos y promesas, que bien saben son un amargo atisbo de verdad.
ResponderEliminarBesos, linda.
Imagino que deduces que va a Francia por la matricula; de cualquier modo va petado (de ropa y?) para amortiguar gastos del viaje. El Mercedes de la segunda foto tiene matrícula de Marruecos y me callo ya, porque extendería mucho esto con mi elucubración; ¡aburrir no (pretendo)!
ResponderEliminarP.D. 'Marroquíes' será más culto que 'marroquís', pero qué forzado suena. ¿Dices tú 'maniquíes' o 'iraquíes'?
Sí...yo me siento un poco igual...
ResponderEliminar...las sensaciones en el viaje de ida no son las mismas que las de la vuelta!
Besos,Tracy!!!
No te creas, muchos ya son franceses...
ResponderEliminarSeguro...
ResponderEliminarBss,Carmen
Recuerdo haber hecho un viaje parecido hace años, pero sin la baca. Por fortuna, el mío era el de vuelta definitiva, porque la sensación es de no tener casa fija y no te acostumbras.
ResponderEliminarLa carga es pesada, el viaje arriesgado. Pero ver a la familia, tu tierra eso lo hace mas llevadera. La vuelta sin carga solo con el corazón lleno de besos y la esperanza de regresar. Abrazos
ResponderEliminarSi nosotros estamos tristes a la vuelta, imagina...
ResponderEliminarA mi también.
ResponderEliminarMe pasa lo mismo, un abrazo.
Lo mismo pasa entre USA y México, un intercambio de gente, de cosas, de esperanzas.
ResponderEliminarVolver a casa cargado de regalos para enseñar lo bien que ha ido, para repartir lo que se consigue con quien se quiere.
ResponderEliminarVolver al trabajo cargados de la esencia, con todo lo que les recordaran de donde vienen.
Afortunados que tienen a donde y porque volver.
Desafortunados porque no lo tienen en el lugar al que pertenecen.
Aquí, de este lado del mundo empezamos despacito a prepararnos desde el animo y los proyectos para alistar los autos y salir de vacaciones.
ResponderEliminarAcuerdo con vos que esas imagenes dan tristeza!
Beso+
parece que "volver con la frente marchita" que cantaba Gardel
ResponderEliminartambién es aplicable al regreso de vacaciones ¿eh?
saludos
Como si quisieran transportar el mundo que dejan atrás...
ResponderEliminarNo lo podrías haber dicho mejor.
La verdad es que en estas fechas las carreteras están llenas de vehículos así.
Da pena, si. Dejar tu casa nunca es fácil.
Besos mediterráneos.
Difícil ser paria
ResponderEliminarY aguantar pprejuicios
A mi me parecería un suplicio hacerlo todos los años... esas distancias tan grandes... bravo por ellos.
ResponderEliminarCierto, es una imagen de nuestros veranos.
No lo dudo, Tracy.
ResponderEliminarCreo que la tristeza comienza cuando cargas el coche para regresar a la rutina de todos los días.
ResponderEliminarBesosss
La verdad que es triste por esos países del otro lado del charco se pueden observar cosas diferentes de la vida que nos sacuden, por estos lares no se ven esas situaciones pero sí otras que también sacuden.
ResponderEliminarBuena entrada Tracy.
Besos.
¿Qué puedo decirte? Si me la paso viajando,
ResponderEliminarpero en avión, y con equipaje muy liviano.
Besos
Pero viajo siempre a donde tengo familia o amigos.
ResponderEliminarSolo en los lugares en donde tengo cariño, monto
mi tienda peregrina. Es en esos lugares donde partes de mi
corazón quedan............y a los que siempre vuelvo.