Es este el tema elegido por Charo, veremos lo que da de sí el tiempo del reloj.
Si queréis curiosear sobre lo que escribimos, pinchad aquí
MI RELOJ
Ha estado siempre conmigo desde que tengo uso de razón, al menos que yo recuerde.
Desbancó a los relojes que fueron llegando a mi vida en momentos importantes de ella, no sentía envidia de aquellos aparatitos que seguían los dictados de la moda, sabía que tarde o temprano él seguiría siendo el que marcara mis tiempos.
Mi reloj no es de oro ni plata, tampoco es analógico ni digital, no tiene marca conocida y a pesar de todo esto, tiene un valor incalculable, al menos para mí, porque nunca se ha retrasado, ni se ha adelantado un ápice de segundo, siempre ha marcado el tiempo con una precisión que ya la quisieran los maestros relojeros suizos para sus preciadas y costosísimas marcas.
Cuando ha llegado la "moda", relativamente reciente, de atrasar o adelantar la hora, al llegar el invierno y al comenzar el verano, como si con eso la estupidez humana quisiera controlar y compartimentar el tiempo a su antojo, él ha estado atento y aunque refunfuñando, ha sido fiel a su cometido de marcar los diferentes momentos del día con su acostumbrada puntualidad y según las normas dictadas por periódicos y telediarios.
Eso sí, tiene una particularidad: su sonido sólo puedo escucharlo yo, aunque a veces si no le hago caso puede alterarse y hacerse oír con tanta potencia como el despertador de campana que había en casa de mi abuela.
La pena es que no os lo puedo enseñar porque lo llevo metido en las mismísimas entrañas y es el encargado de avisarme cuando la gazuza aprieta y es el tiempo de saciarla.
En este momento me está avisando que es la hora de hacerle una visita urgente al frigorífico, así es que lo siento, os tengo que dejar.
¡Qué impertinente se pone a veces, no respeta nada!
Yo también lo tengo y la marca del mío es BORBOGIGMO y a fe que tambien me funciona bien.
ResponderEliminarBesos.
Todos tenemos nuestro propio borboritmo y suelen funcionar bien.
EliminarTic... tac...tic... (me queda un suspiro para salir pitando)
ResponderEliminarBesines utópicos, Irma.-
Pues corre, si te lo marca él, no esperes.
EliminarGran relato, gracias por compartirlo. Abrazos
ResponderEliminarGracias a ti siempre, por venir y comentar.
EliminarEl mejor nuestro reloj interno
ResponderEliminarnuestro reloj a golpe de latidos
a golpe de emociones
tic tac
toc toc
sigamos dando cuerda a la vida
sigamos latiendo sin horas
en nuestro propio tiempo
Bello comentario me dejas y además con moraleja a la vista.
EliminarGracias guapísima.
Los relojes son como los políticos. Cada vez que les miras te dicen una cosa diferente.
ResponderEliminarCosecha propia.
Jajaja, qué buena comparación...
EliminarJa ja ja... muy bueno, tienes el mejor reloj. Se parece un poco al mío.
ResponderEliminarBesossss
Para mí el mejor, me entiende a la perfección y yo a él también.
EliminarLLevo un reloj japonés de 10€, cuando me acuerdo de ponérmelo, una marca muy conocida. Para colmo, puedo bañarme con él y me es útil en la piscina, pero no cuenta y con valor ni aprecio. Para mí el reloj no es una pieza fundamental.
ResponderEliminarBesos.
Fíjate si para mí el reloj tiene poco aprecio que en vacaciones me lo quito y vivo libre de horarios. Sólo me dejo guiar por mi reloj interior que no me engaña.
EliminarQue casualidad, precisamente hoy me acabo de comprarme uno para llevarlo a la playa, ya que me dejaba siempre el relo atrás y para colmo dejo el smartphone en el apartamento.
ResponderEliminarBesos
Pues te deseo que te salga bueno y que no le hagas demasiado caso, sobretodo en vacaciones.
EliminarOriginal reloj el tuyo.
ResponderEliminarUn beso.
Pues tú debes tener otro como el mío...
EliminarReloj no marques las horas
ResponderEliminarporque voy a enloquecer
ella se irá para siempre
cuando amanezca otra vez
No más nos queda esta noche
para vivir nuestro amor
y su tic tac me recuerda
mi irremediable dolor
Reloj detén tu camino
porque mi vida se apaga
ella es la estrella que alumbra mi ser
yo sin su amor no soy nada.
Detén el tiempo en tus manos
Haz de esta noche perpetua
para que nunca se vaya de mí
para que nunca amanezca.
Detén el tiempo en tus manos
Haz de esta noche perpetua
para que nunca se vaya de mí
para que nunca amanezca.
Reloj detén tu camino
porque mi vida se apaga
ella es la estrella que alumbra mi ser
yo sin su amor no soy nada
Me has traído una canción que fue la primera que baile en mi vida y la bailé con el chico que me gustaba...
EliminarHola. He llegado a tu blog y me ha encantado tu reloj. Y es que es verdad que el mejor reloj es el que llevamos dentro. Un abrazo
ResponderEliminarEncantada de verte por aquí, vuelve cuando quieras, estás entre amigos que nos lo pasamos bien.
EliminarUn abrazo.
Jejeje
ResponderEliminarMuy bueno, en lo único bueno de mi reloj que siempre me avisa cuando ya es hora de dormir y siempre muy temprano me despierta que es un nuevo día...
¿Y eso es malo?, yo diría que es buenísimo.
EliminarLo que menos me gusta es tener que atrasar o adelantar la hora, sobre todo, porque cuesta unos días adaptarse al nuevo horario.
ResponderEliminarBesos.
Sigue a tu reloj interior y no tendrás que adelantar y atrasar dos veces al año.
EliminarJajaja! Siempre tan original Tracy!Es el reloj más importante al que hay que hacerle caso!
ResponderEliminarMuchas gracias por participar.
Un beso
Gracias a ti por conducirnos tan maravillosamente como lo has hecho.
EliminarEs que como el reloj interno no hay ninguno....buenisimo, besos.
ResponderEliminar¿A que sí?
EliminarPara mi el reloj es muy importante he llegado a tener uno en cada habitación. Soy un fanático del tiempo.
ResponderEliminarEl tempus fugit...
EliminarUn reloj sabio, sale siempre la razón
ResponderEliminar... y la hora exacta en que avisar.
EliminarEse reloj que nos cuida el cuerpo y el alma es muy importante, Tracy...Yo trato de serle fiel, porque forma parte de mi misma.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño
Hay que serle fiel, porque él las infedelidades las paga caras.
EliminarJaja un reloj interno muy preciso, calibrado con tus propias y personales necesidades! Muy buenas reflexiones, Tracy 😄 un abrazo
ResponderEliminarOtro abrazo para ti Neo.
EliminarSin duda, es el mejor de todos :)
ResponderEliminarBesos y salud
Estamos de acuerdo.
Eliminar¡Hola! Qué original forma de encarar la propuesta. Me ha encantado.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Cuanto me alegra que haya sido así.
EliminarBesos.
Yo también tengo mi reloj biológico y me funciona muy bien. Sólo se marea unos dìas cuando viajo cambiando de hemisferio.
ResponderEliminar¡Qué contenta me puse al saber que te gustaron "mis" mosaicos!. Ya volveré en algún momento a ver los de Córdoba.
Besotes
Córdoba te esperará con los brazos abiertos.
EliminarBuena entrada Tracy. Sin duda el reloj biológico es el que no falla. casi nunca. Pero debemoa cuidarlo con mimo, porque si no funciona o marca a deshoras, estamos perdidos.Un beso.
ResponderEliminarHay que cuidarlo muy bien, llevas mucha razón.
EliminarBesos
Creo que si nos fiáramos exclusivamente de ese reloj nadie llegaría puntual a ninguna cita, salvo que fuera para comer, claro.
ResponderEliminarPara comer, para dormir, para amar...es el que regula todo.
EliminarEse reloj nunca desaparece, aunque a veces se pone de lo más cabezón.
ResponderEliminarUn saludo.
Cabezón es un rato largo, al menos el mío y por lo que leo, el tuyo también lo es.
EliminarUn reloj interno y demandante. Bien planteado tu relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Demi.
EliminarUn abrazo.
Ahí está, el mejor reloj es el que llevamos dentro. Ese no se equivoca y se mantiene al margen de los malditos cambios de hora.
ResponderEliminarUn beso.
Ni hay que cambiarle las pilas.
EliminarMejor reloj que ese no lo hay,vamos seguro.
ResponderEliminarBesos
Segurísimo.
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