NOS VAMOS AL TEATRO

 Hace unos días me permití ir al teatro para ver un cásico que parecía que tocaba en Febrero.

 Todxs conocéis la obra y sabéis que muere hasta el "apuntaor", no estaba yo para eso, pero lo que me movió a ir fue la puesta en escena que corría a cargo de Kurt Allen, os he hablado de sus magníficos montajes que siempre te dejan con la boca abierta y pensando cómo se les habrán podido ocurrir estas ideas, lo digo en plural porque en esta ocasión también el decorado lo ha firmado su mujer, Leticia Gañán, los dos son arquitectos y se dedican a esta actividad artística,  que pone de manifiesto una y otra vez su creatividad.

El decorado se ciñe a una estructura movible y hueca, que según se gire a un lado u otro semeja las paredes del palacio donde vive Julieta y el balcón al que se asoma para hablar con Romeo

o las calles donde surgen las luchas entre  Capuletos y Montescos

La escena final es impactante, incluso es la que se refleja en el cartel de la obra, es  esa misma estructura que al abrirse muestra el mausoleo de Julieta en su muerte aparente, encontrada por Romeo  entre miles de rosas 

La obra continua con el brebaje que se toma él y al despertarse ella y verlo muerto, apura la pócima de su amado Romeo y también muere.

La obra la integraban un elenco de actores, en su mayoría, muy jóvenes,

Sobre todo Romeo y Julieta que si hubieran tenido una poquita de más experiencia, se hubiera agradecido

Aún así, lo que menos me gustó fue el vestuario, un guiño a la actualización de la obra, que surtió un efecto distinto al que se esperaba y eso que yo, como espectadora, admito todas las locuras  que se puedan hacer en la adaptación, siempre que no chirrien.

Ese es mi punto de vista y por lo tanto subjetivo cien por cien.

La sala, con el aforo permitido, estaba llena y con muchas ganas de ver teatro, a pesar de que hacía un sol espléndido y la función empezaba a las cuatro de la tarde para acabar a las seis. 

¡Hay que tener ganas de ir al teatro!

Mi aplauso para ellos y mi recomendación de ir al Teatro, porque creo que es uno de los espectáculos más seguros que hay , respecto a la pandemia que estamos viviendo.