para mí, vosotros podéis tomar lo que queráis o lo que podáis, porque estoy en un bar, al lado del olivar.
Yo me voy con mi infusión a un olivo.
Tal como está la cosa no me conformo con una ramita de olivo para pedir la paz, os mando el olivo entero para solicitar esa paz que tanto anhelamos y nos hace tanta falta.
En su tronco hueco,
voy a guardar mis deseos de:
Incluso puede que pruebe a meterme yo en ese hueco, hasta que pase todo este ruido que no nos deja vivir.
¿Creéis que quepo?
Yo creo que sí.
Ojalá sea escuchada nuestra petición. PAZ.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Ojalá!
EliminarQue imágenes más bonitas Tracy.
ResponderEliminarYa estoy de vuelta, feliz semana.
Un beso
¡Bienvenida a casa!
EliminarBonitas imágenes. El olivo es mi árbol favorito...
ResponderEliminarMe tomo el té calentito y te dejo unos abrazotes fuertes.
En eso coincidimos y más siendo andaluzas.
EliminarQue imágenes guardará aquel milenario arbol, años observando todo
ResponderEliminar...
Esas preguntas me las hago yo muchas veces, y pienso que estoy un poco loca, pero mira... hoy al leerte, he pensado que si un hombre como tú lo piensa también, una de dos: o estamos locos los dos o yo no estoy loca. prefiero quedarme con la segunda disyuntiva.
EliminarCuando leí el titular pensé, una copita de manzanilla bien fresquita y unas olivas de tapa, me equivoqué, la cosa iba por otro lado.
ResponderEliminarEn cuanto a la paz, no se, me gustaría equivocarme, pero esto no tiene buena pinta, sobre todo cuando escuchas en una emisora seria, que Francia vendía armas a Rusia hasta una semana antes del conflicto, unas armas que están sirviendo para matar a ucranianos, mientras Macrón, Presidente de Francia, se está luciendo con reuniones y haciendo gestos para sus próximas elecciones presidenciales poderlas ganar, vergüenza.
Saludos
Acabo de enterarme que a la periodista rusa la han puesto en libertad, por algo se empieza, no debemos perder la esperanza, Francia es... Francia.
EliminarLa paz sea contigo y se haga extensible a todos los rincones de la tierra. Paz y pan para todos.
ResponderEliminarUn abrazo.
... y con tu espíritu, hermano.
EliminarAh, ahí entendí la foto primera, yo decía, cómo hizo? El tronco de ese hermoso árbol es el depositario de tu manzanilla y los deseos de todos nosotros de que esto termine, un abrazo grande por la paz Tracy!
ResponderEliminarPerfecto!
EliminarOtro abrazo para ti, hermana.
Ojalá llegue pronto esa paz tan deseada... pero no lo veo. La gente sigue igual o peor que antes de la pandemia: buscando guerra. En fin.
ResponderEliminarBesos, Tracy.
Hazme por fa un huequecito en ese olivo contigo, me gustaría también no ver tanto sufrimiento, muertes, destruccion, desolación, caos,desunión...
Somos muy beligerantes y la pandemia nos ha puesto más aún y las ansias de poder que no cesan... imagínate lo que puede salir de esa mezcla.
EliminarEl hueco está hecho, pero mejor que acabe todo este terror.
A su sombra me quedaba yo a tu lado... Bicos
ResponderEliminarYa somos tres.
EliminarCabes. Por esas infusiones que hacen bajar la tensión :-)
ResponderEliminarUn abrazo, Tracy
Otro abrazo para ti, Albada.
EliminarAunque soy muy de cafè, me gusta mucho una infusión de vez en cuando (y charlando contigo mucho mejor).
ResponderEliminarMolts petons
Agradezco tu deferencia es todo un gesto.
EliminarMolts petons
Seguro que sí, tú eres una conseguidora, mujer de fuertes convicciones y grandes y admirables comportamientos, Tracy.
ResponderEliminarNoto, no solo en ti y en tus textos, que sí vivimos afectados por lo que sucede en Ucrania y, seguramente, en otras partes del mundo, pero esta guerra, la de Goliat contra David que vemos en Europa, nos cae muy cerca y se nos han desmontado muchos de los pilares morales y sociales que teníamos como sustento de un bienestar que nos parecía y ya no sé si aún nos lo sigue pareciendo, un derecho adquirido de modo irreversible.
Vivimos afectados, así es... deseémonos suerte.
Un placer leerte, siempre.
Mucha suerte Enrique y también muchos besos.
EliminarDan ganas buscar un buen refugio como ese.
ResponderEliminarPues vente p'acá, que aquí abundan los olivares.
EliminarHola TRacy, sí si entras dentro de ese hueco porque las ganas de que todo esté en paz hará lo imposible para que puedas meterte. Seguro que el olivo se sintió bien querido al tenerte tan cerca tomando esa infusión.
ResponderEliminarAbrazos
Me tiene una predilección especial, porque él es mi árbol preferido, así que me acogerá con cariño.
EliminarOye, ¿quepo yo contigo? Me encanta ese olivo acogedor; me pido un cafetito. :)
ResponderEliminarNo hace mucho vi un olivo centenario casa donde vivió antiguamente una familia entera!
Ellos lo dan todo. También paz.
Que tu bello ruego sea una realidad.
Un abrazo muy grande :)
Donde caben tres, caben cuatro. Te esperamos.
EliminarQue así sea.
Un abrazo
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ResponderEliminarPues vale.
EliminarSí que vale
EliminarTe deseo suerte
Y yo a ti.
EliminarCabes de sobra y por eso me voy a meter contigo. Tu con manzanilla y yo con una tila.
ResponderEliminarÉsto es insufrible. Un NO a la guerra, porras.
¡Ya somos cinco!, nos lo vamos a pasar estupendamente, ¡fuera depre!, da igual la tila o la manzanilla, el alboroto para apagar el sonido bélico , está servido.
EliminarBesos y ¡¡¡ARRIBA!!!
Yo tampoco me conformo con pedirle al olivo una ramita para simbolizar la paz. Le pediría que le cayera bien caído a alguien que yo me sé en la cabeza y que no pudiera volver a levantarla.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Será por olivos...?
EliminarTu veras...
ResponderEliminarA ver si luego no puedes salir.
No creo, pero si eso, te aviso y vienes a sacarme, jajajaj
EliminarEl olivo es uno de los arboles mas icónicos y a mi me gusta mucho. Hoy voy a la carrera
ResponderEliminarTranqui, que para todo hay tiempo.
EliminarLe dijo la sartén al cazo...
Ese olivo debe ser milenario... ojalá y las ramas del olivo se expandieran por todo el mundo y dieran cobijo a quienes lo necesitan y proclamaran el fin de todas las malditas guerras.
ResponderEliminarBesos
Ojalá se pudiera hacer eso...
EliminarYo estoy rodeada de olivos. Besos y paz.
ResponderEliminarSuerte para ti, si es que no eres alérgica.
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