Se han puesto de moda las terrazas en los últimos pisos de los grandes hoteles, para rapiñar la poca brisa que se levante en estos días calurosos del verano.
Por estas fechas nunca estoy en Córdoba, por lo que ha sido este año el primero que estoy disfrutando de ellas: de sus vistas, de sus silenciosas avenidas y de sus fuentes calladas bajo nuestros pies, haciéndonos creer que estamos a dos metros del cielo.
Por estas fechas nunca estoy en Córdoba, por lo que ha sido este año el primero que estoy disfrutando de ellas: de sus vistas, de sus silenciosas avenidas y de sus fuentes calladas bajo nuestros pies, haciéndonos creer que estamos a dos metros del cielo.
Aunque la verdad es que cuando la noche es calurosa, ni aquí arriba se mueve una hoja, pero como los vaqueros que marchaban al Oeste guiados por la fiebre del oro, los pocos cordobeses que estamos por aquí, guiados por la fiebre del frescor, nos subimos a las alturas aunque a veces sea vano nuestro intento de cazar alguna brisa despistada que surja por aquí arriba.
Se agradece el intento que se hace para amenizar con jazz, esas noches-madrugadas calurosas,
En la barra no paran de preparar combinados imposibles,
copas... cócteles... para contribuir a que pasemos parte de la noche lo mejor posible, aunque la alta temperatura es otra invitada más que se sienta a nuestro lado y no nos deja respirar.
Cuando parece que un airecillo tenue se levanta, es la hora de irse a casa, no sin antes echar una mirada de lascivo deseo a las tumbonas que hay al lado de la piscina.
Nos hacemos los remolones... pero hay que marcharse si no queremos encontrarnos con los guiris que suben a bañarse al alba.
Se me olvidaba deciros el nombre del Hotel en cuestión es el:
AC Palace de 5 estrellas
(Paseo de la Victoria s/n)
Al que los cordobeses llamamos cariñosamente "el oxidao" y menos cariñosamente "el mohoso".
Se agradece el intento que se hace para amenizar con jazz, esas noches-madrugadas calurosas,
En la barra no paran de preparar combinados imposibles,
copas... cócteles... para contribuir a que pasemos parte de la noche lo mejor posible, aunque la alta temperatura es otra invitada más que se sienta a nuestro lado y no nos deja respirar.
Cuando parece que un airecillo tenue se levanta, es la hora de irse a casa, no sin antes echar una mirada de lascivo deseo a las tumbonas que hay al lado de la piscina.
Nos hacemos los remolones... pero hay que marcharse si no queremos encontrarnos con los guiris que suben a bañarse al alba.
AC Palace de 5 estrellas
(Paseo de la Victoria s/n)
Al que los cordobeses llamamos cariñosamente "el oxidao" y menos cariñosamente "el mohoso".
Sigue disfrutando que ahora me llega mi programa de agosto que, aparte de libros, se dirige al aire libre y nocturno con Jazz, flamenco, danza y Teatro en espacios maravillosos y ya puestos con alguna que otra bajada a la costa de ida y vuelta.
ResponderEliminarSaludos
Para mí ese programa cultural y el mar son mis mejores vacaciones., así que disfruta y acuérdate me ní cuando estés en ese paraíso.
EliminarNo conocía al "Mohoso", pero ya si fotográficamente.
ResponderEliminarVeremos como se porta Agosto, que hay un refrán que dice: Agosto, frio en rostro.
Claro que esto lo podrá decir Nuestra común amiga Trimbolera. No por estos Lares.
manolo
Es que este hotel está hecho muy recientemente, está ubicado en donde estaba el Córdoba Palace, ese sí que lo conocerás ¿no?
EliminarQue verano Tracy!!!
ResponderEliminarUfffffffffff
Hay que ir a la montaña.
Y cuanto más alto mucho mejor.
Noches con 7 grados...
Que ganas...
Besos.
Llevas mucha razón, porque aquí abajpo sólo piensas en la montaña para tirarte de cabeza por ella.
EliminarBesos.
Precioso reportaje. Estas mismas imágenes podrían ser de otras ciudades, pues por todos lados están haciendo lo mismo. Estuve un corto espacio de tiempo vinculado al hotel Maimónides, ¿tiene también una de estas terrazas o todo lo absorbe la Mezquita?
ResponderEliminarBesos.
No sabría decirte, pero creo que no, a pesar que lo han reformado últimamente, pero está tan encima de la Mezquita que casi no tendría perspectiva sobre ella.
EliminarUn beso fuerte.
Tu país es un sueño que algún día deseo cumplir. Cada día aumentan los lugares que deseo conocer y este es: una maravilla.
ResponderEliminarAbrazos Tracy.
Pues no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy, jejejejeje
EliminarBuena idea!
ResponderEliminarYo me hubiera tirado a la piscina...jjajajjaaj
Besos Traviesos
¿Crees que no me dieron ganas? pero me sujetaron a tiempo, jejejeje
EliminarEstupendo reportaje Tracy y buena sugerencia :-)
ResponderEliminarY además se ven las cosas desde otro punto de vista no tan habitual.
Un beso.
Sí, todo cambia visto desde arriba.
EliminarEstá un poco torcido ese mohoso vuestro jaajajajaja bonito reportaje de tu tierrina, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarAbrazote utópico, Irma.-
Torcido es poco, jajajaja
EliminarQue buena idea las terrazas en las azoteas, se minimiza el ruido, el paisaje nocturno que normalmente no disfrutamos, y el silencio de las calles acompañan. A lo mejor empieza a cundir la idea y terminan esos ruidosos bares instalándose en las azoteas en edificios de oficinas, para molestar lo menos posible con el ruido...
ResponderEliminarBesos y salud
No dudes que si vienen veranos como este, no dudarán en hacerlo allí, donde sea menos caluroso.
Eliminarbuenas imágenes
ResponderEliminary que decir de la ultima fotografía
saludos!
De la última foto... mejor no digas nada, jajajajaja
EliminarBuen lugar
ResponderEliminarSí, perfecto para las noches veraniegas.
EliminarHermosos lugares Campanita.
ResponderEliminarMuchos besos.
¡Feliz sábado.
Ya feliz domingo, preciosa.
EliminarQué buena idea para las noches de verano!!
ResponderEliminarAbrazo!
Por eso van cundiendo estas terrazas como si fueran hongos
EliminarSe mira que es un lugar que se debe conocer.
ResponderEliminarSaludos Tracy, gracias por compartir.
Un sitio estupendo.
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