martes, 12 de enero de 2010

EGIPTO EN ROMA

Quiero acabar estos post de Roma, dedicando el último de ellos al barrio que me ha acogido durante los días pasados allí: el Testaccio.
Se llama así porque es un montículo artificial formado por las ánforas, deterioradas o no, en las que se había  trasladado  el aceite desde  la Bética a Roma. Estaba situado muy cerca de los almacenes portuarios y de la Vía Ostiense que llegaba al mismo puerto de Ostia.
 Era una especie de vertedero muy bien organizado. Económicamente no les merecía la pena limpiar los recipientes que habían resultado ilesos en el traslado y mandarlos de nuevo a Hispania, por lo que los iban depositando allí, de dónde viene el nombre por el que también se le conoce: "el monte de los cascos".
Hoy día,  el punto de referencia de toda esta  zona  es la Pirámide de Cayo Cestio, magistrado  que se construyó, al más puro estilo egipcio, este enterramiento doce años antes de Cristo.

Se visita interiormente, pero hay que currárselo muy mucho para saber el horario y demás inforrmación  referida a ella.
Detrás de la Pirámide está  el Cementerio Protestante, donde se encuentran las sepulturas de personajes tan importantes como Shelley, Keats, entre otros.
Desgraciadamente no lo visité, como tampoco visité la Centrale Montemartine, antigua central termoeléctrica que se convirtió en museo de ella misma consiguiendo que  sus motores,  turbinas y demás aparatos eléctricos convivieran  con esculturas de dioses y héroes de la época clásica.
Ni una cosa, ni otra se contemplan en los circuitos  turísticos. ¡Qué pena!
La próxima vez haré mi propio circuito.Será un motivo más, para volver.
Arrivederci, Roma.                                        

3 comentarios:

  1. gracias por este post! no sabía la historia de la pirámide, y la historia del monte Testaccio la he recordado al leer tus explicaciones: claro que sí, allí se depositaban las ánforas rotas que venían de la Bética! cómo haberlo olvidado! muy interesante, tracy.

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  2. Leyéndote entran ganas de volver a Roma. Gracias.

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