JUEVEANDO CON MI COMARCA

Esta semana nos dirige el Gran Maestro, Gus.

Nos pide que hablemos sobre nuestra Comarca y aquí estamos, una manera de conocer las comarcas de cada uno de nosotros es leyendo lo que se escribe aquí  y espero que os guste.

COMARCA DEL VALLE DEL GUADALQUIVIR

"Besando el Guadalquivir mi Córdoba se levanta; 
artesanía de calles y rinconcito con plaza,
blanco de cal es el fondo de sus macetas colgadas. "
    
                                                   (Angeles Asensio)

Córdoba capital, está situada en la comarca central  de la Provincia de su mismo nombre, atravesada de Este a Oeste por el Río Guadalquivir en su curso medio. 

 El discurrir de sus aguas hace un gran meandro al entrar en el núcleo urbano como queriendo con ello acariciar no sólo la parte histórica de la ciudad sino aquellos otros barrios situados en su margen izquierda, balcón privilegiado para contemplar la Mezquita y El Alcázar que están en la margen derecha.

Seis puentes unen ambas orillas a su paso por la capital, abrazando al Río y dándole el valor que se merece como elemento integrador de sus habitantes. 
La Torre de la Calahorra, la Puerta del Puente Romano y los Molinos que salpican su cauce, son testigos mudos de otras épocas en las que el Guadalquivir era navegable casi hasta la misma puerta de lo que hoy es la Mezquita. Sus productos agrícolas: aceites, vinos y cereales eran exportados a otras zonas del Imperio, como también lo son ahora.
La fauna y flora del Soto de la Albolafía alegran el discurrir de sus aguas camino del resto de la Provincia: El Castillo de Almodóvar, desde sus almenas, otea el horizonte para contemplar su llegada desde la capital y recibirlo como se merece siguiéndole la pista hasta que lo pierde de vista camino de otros pueblos cordobeses, como Posadas o Palma del río, quienes recogen el testigo para acompañarlo hasta su entrada en la provincia de Sevilla.

















Sierra Morena arropa a Córdoba y a las terrazas fluviales que la rodean, dedicadas al cereal, al viñedo y al olivar. 
A la vera misma de sus aguas hay grandes plantaciones de naranjales y limoneros, que ponen una nota multicolor en los campos de la comarca.
Río y Sierra, Sierra y Río vertebran la vida de esta ciudad y dan unas señas de identidad de siglos, a las gentes que la habitan hoy.
Esta es la comarca en que se ubica mi ciudad, habría para decir más, si Tésalo y sus leyes no estuvieran contando los renglones.