Tema propuesto por Mag que nos facilita el comienzo de una carta para que la terminemos explicando como es la vida oculta de ese Faro. Las cartas llegará a SU BLOG , allí podréis leerlas.
Amantes del mar tranquilo y sereno en el que estaban acostumbrados a jugar desde pequeños, nunca le habían perdido el respeto, quizás porque sus padres en sus riñas les repetían incansablemente que el mar era muy traicionero, ellos siguieron jugando en él y a medida que los años fueron pasando, cambiaron de juegos pero seguían respetando el espacio del mar y cuando lo veían encrespado y rugiente se apartaban a lugares más tranquilos, para volver cuando sus aguas se habían apaciguado y se convertían en cómplices de su amor.
Un día de mar serena y Luna Llena, aprovecharon para pedirle a los fareros que los dejaran subir a lo más alto del Faro para prometerse un amor eterno ante la inmensidad del mar, la cercanía de la Luna y la brisa del aire.
Los fareros los dejaron subir , con la condición de que ellos los acompañarían hasta arriba, pero se quedarían en la linterna, para respetar la privacidad de su juramento.
Eligieron el día teniendo en cuenta las condiciones atmosféricas de él, nunca habían disfrutado tanto.
A medida que iban ganando altura el paisaje se iba ensanchando, el mar se iba ondulando llegando a besar una y otra vez las tierras de la ribera con más fuerza, el cielo se iba oscureciendo a la par que el mar, movido por los fuertes vientos.
Nunca habían disfrutado de aquella imagen: el oleaje adornaba con encajes de espuma la base del Faro llegando hasta los propios enamorados.
Los fareros viendo el peligro que corrían, los invitaron a abandonar el balconcillo donde no los veían seguros, pero la pareja abrazados jurándose amor eterno ante los elementos, no los
escucharon y el farero se vio obligado a salir por ellos en el preciso momento que el zarpazo de una ola precipitó a los tres en el abismo.
P.D. Soy la mujer de Juan, el farero, sólo quiero contar los hechos tal como sucedieron para que no busquen a ningún responsable de la muerte de ellos tres ni de la mía propia, que me voy a reunir con ellos por propia voluntad.
Si existe algún responsable es el amor, en el caso de los muchachos, y en el mío propio, no podría vivir sin él. En el caso de mi Juan fue el evitar la desgracia de ellos, que imaginaba que conduciría a la nuestra.
Y no se equivocó.
Esta es la descripción de los hechos y cuando aparezca esta nota en el pupitre de la linterna del Faro, ruego se le entregue a la policía para que no busquen culpables. Sólo os pido que nos dejéis vivir en paz nuestro amor en los alrededores de este Faro.
Wua, un amor eterno de los que es difícil de hallar.
ResponderEliminarMe has dejado pensativa, ya la firma prevenía que algo iba a suceder y asi fue.
Un besote, feliz viernes.
Se prometieron amor eterno y las fuerzas de la Naturaleza no tardaron ni un minuto en dárselo.
EliminarUn besazo
Brillante y poético relato. El mar también tiene estas historias que ni son tan azules, ni tienen suavidad de brisa, ni caricia de espumas.
ResponderEliminar¡Pero el mar siempre redime! A pesar de que algunos amores naufraguen.
Besos.
Gracias por los calificativos que le has dado al relato.
EliminarLa verdad es que al mar hay que tenerle respeto y más cuando está encrespado como lo pinta la imagen que se nos dio.
No he tenido más remedio que cargarme hasta el apuntador
Besos
Muy taxativo, unos en plena ilusión y otros por las circunstancias.
ResponderEliminarUna tragedia en toda regla.
EliminarUn relato asombroso, Tracy, la fatalidad llevándose vidas en un abrir y cerrar de ojos, un abrazote!
ResponderEliminarVaya!, siento haber sido tan certera para quitarlos a todos de en medio.
EliminarAhora me arrepiento.
La tristeza entre toda la belleza de esta prosa poética que cuenta la historia de los enamorados, y esa decisión fatal de la mujer. Un Faro para recordar, seguro!
ResponderEliminarUn abrazo Tracy :)
A mí me gustan mucho los Faros, pero para recordarlo con más dulzura, no con tanto dolor.
EliminarBesos
Hola Tracy. Es curioso como la muerte y el faro se han complementado por muy diferentes motivaciones en la mayoría de los relatos. En tu hermoso aunque trágico relato, ha primado el amor tanto de los dos amantes como del farero y su esposa. Me ha encantado.
ResponderEliminarHe intentado dulcificar la escena con amor, porque el desastre se veía venir.
EliminarGracias Pepe por tus palabras.
Vivir en un faro tiene que ser bonito. Como tu relato.
ResponderEliminarA mí me encantaría, de verdad.
EliminarInteresante detalle el de incluir la firma manuscrita de la autora de la carta, la mujer del farero.
ResponderEliminarTal vez la pareja no eligió las mejores circunstancias. Lo que tuvo resultados trágicos.
Muy bien contado. Un abrazo.
Sí, eligió el mejor día, pero luego se empezó a poner feo, yo creo que los Elementos anduvieron prestos en hacer su amor eterno-
EliminarGracias Demi por tus palabras.
Tracy ... inmenso. No puedo decir nada más. Tengo alguna duda o quizás más de una: ¿Claudia eres tú? ¿Historia real?
ResponderEliminarJajajajaja Enrique , me has hecho reír porque me has recordado el chiste de que van dos chicas Punky a un pueblecillo muy chico y hay dos viejecillos tomando el sol en la plaza y al verlas con esas pintas , se acercan y les preguntan:
Eliminar- Señoritas, ¿preguntar ofende?
- No, pregunte lo que quiera.
Y los viejetes le dicen.
- Ustedes "seis" putas, ¿verdad?
Cuando me has dicho lo de las dudas, casi me parto de la risa y he pensado, a ver por donde sale Enrique.
Te contesto:
1º ¿Como voy a ser yo Claudia, si estoy vivita y coleando?, Claudia cuando tú has leído la carta estaba ya con "su Juan" en el fondo del mar.
Esa firma la he cogido de "interné", para darle más veracidad a la confesión de los hechos y parece que lo he conseguido.
2º No es real , ojalá mi marido hubiera sido farero, me gustaría vivir en un Faro y estar viendo el mar siempre. pero desde luego no creo que haya pasado eso alguna vez, la gente no es tan romántica, ni está tan loca como la que ha escrito el relato (que no se llama Claudia, sino Tracy), como para subir fuera de la linterna, a jurarse amor eterno en una noche de temporal.
Enrique me has hecho pasar un rato muy bueno, te lo agradezco de verdad, ha merecido la pena porque todos hemos salido ganando:
. La parejita brazados eternamente, para siempre.
. la Farera con su Juan, también eternamente
. Juan ha muerto satisfecho de que ha cumplido con su deber
. Tú has resuelto tus dudas
. Y yo me he reído aclarándotelas.
Un abrazo Enrique y gracias por el buen rato que he pasado.
Pues ahora el que se ha reído soy yo, Tracy, con un texto así podrías dedicarte a la política y redactar leyes con la seguridad de que nos convences a todos. Se intuye la farsa, pero debo reconocer que hay estilo en tu forma de hacerlo, yo me había enamorado de Claudia y "matarse así" ... qué pena. Me quedo llorando, Tracy y mucho.
Eliminar¿A la Política?, quita... quita...
EliminarMira que haberte enamorado de la Farera... ¡Me cachis! pero si no conoces más que su firma, pues no llores más , la farera estará con su farero, pasándoselo pipa triscando por esas rocas del Faro.
Trágico final para esos amantes que buscaban una promesa de amor eterno, que tal vez se les cumplió de esa forma, aunque arrastraron al farero en ese afán. El amor tantas veces ciega.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce fin de semana.
Nunca un compromiso se ha sellado tan rápidamente.
EliminarDulce finde, para ti Dulce.
Contemplar el mar puede darnos paz y serenidad cuando está tranquilo, pero también su fuerza y furia normalmente deja a su paso alguna desgracia! Y los fareros lo saben mejor que nadie! Un abrazote!
ResponderEliminarLos fareros y la gente que se cría al lado del mar, también sabe c´mo se las gasta.
EliminarEl amor no detuvo el oleaje, se unió a el y juntos viajaron hasta el infinito, Una preciosa creación con PD incluida que le pone el broche de oro.
ResponderEliminarGracias Ester por tus palabras, siempre.
Eliminar¡Hola Tracy! Me ha gustado mucho tu post, gracias por compartirlo.
ResponderEliminarExcelente contenido tu Blog.
Espero que tus días sean siempre coloridos y felices.
Y desearte un buen fin de semana.
Un saludo. Blues Hendrix 😊
Gracias por tus deseos, Hendrix.
EliminarYo espero que vengas por aquí otros días más felices y más coloridos, hoy te has encontrado con un mar alborotado que ha dejado a su paso muerte ( o felicidad), ¿Quién sabe?
Encantada de haberte conocido y también te deseo un estupendo finde.
Precioso. El mar es muy traicionero. Enhorabuena por el relato.
ResponderEliminarMuchas gracias Amparo, celebro que te haya gustado.
EliminarUn abrazo.
Hermosas historias de amor ambas, el sacrificio de una para salvar a la otra sin poder lograrlo. El mar es hermoso, enigmático, pero traicionero también.
ResponderEliminarMe gusta mucho tu historia, diferente a otras romántica y triste al final.
Un abrazo y buen fin de semana.
PATRICIA F.
Si , el amor sirve para suavizar la tragedia, aunque también fue el origen de ella.
EliminarUn abrazo Patricia y gracias por tu comentario.
Es una trama hilvanada entre dos idílios y que quedó muy bien hecha. Te felicito. Lo único es que es bastante trágica y triste, por lo demás... sigue escribiendo, que lo haces muy bien
ResponderEliminarAgradezco tus palabras, máxime si vienen de un escritor.
EliminarEl escribir va conmigo desde los doce años, no creo que lo deje , lo necesito, aunque me tenga que mudar de casa para guardar tanto cuaderno, jajajajaja
Ayyy por qué será que el amor eterno suele venir de la mano de grandes tragedias! Muy triste historia que nos llena de congoja, aunque también de romántico vuelo. Un abrazo
ResponderEliminar¿Sabes por qué?, porque es tan difícil encontrarlo y es tan perfecta la vida con él, que no se cumpliría lo de que esto es "un valle de lágrimas"
EliminarUna propuesta que llevas a buen puerto con tu texto de amantes enamorados.
ResponderEliminarDescribrir la realidad de los hechos, puede ser la única foma de entenderla. Qué tragedia. Un abrazo grande, Tracy.
No soy yo muy de tragedias, pero en esta mueres hasta el apuntador, si es que lo hubiere.
EliminarHola Tracy, esperaba un poema a un faro, jeje, con secretos incluidos, un poema de un faro secreto que solo tú conoces (por ser la autora del poema), eso esperaba... Pero bueno, el relato te ha quedado muy bien y genial con el efecto de la firma, muy real.
ResponderEliminarUn abrazo. :)
No creas que me dedico a elegir entre una cosa u otra. le hago caso a lo que mi musa o muso me dice en ese momento.
EliminarMe alegro de que la decepción no haya sido muy grande y te haya gustado el relato.
Un beso fuerte
vaya a si que noeres tu Claudia ? jajajaja, bueno la historia es de muertes más o menos accidentales menos el suicidio, vamos que el faro era yuyu Un abrazo
ResponderEliminarJajajaja, y "Yo Claudio", menos aún.
EliminarLa imagen del Faro era muy bonita, pero tremebunda, invitaba a la tragedia, ¿o no?
Besos
El faro del amor letal
ResponderEliminarJajaja, se prestaba a eso
EliminarPues ya ves...
ResponderEliminarni con toda la precaución que les inculcaron de niños...
Estoy empezando a tener miedo de bañarme en la bañera.
La naturaleza es cruel, pero ellos mientras caían de lo alto del faro pensaron: que nos quiten lo bailao.
besoooo Tracy
Jajaja un amigo mío decía que cuando bañaba en su casa y no estaba su mujer, se ponía al lado un martillo.¡¡Qué achondo era!
EliminarEstupenda prosa poética y una historia de amor por medio. Buena aportación! Un abrazo!
ResponderEliminarlady_p
Gracias Lady.
EliminarUna pregunta ¿Te
Llegan mis comentarios?
El amor eterno con el mar daba pistas, pero lo del suicidio de la mujer del farero no me lo esperaba, la verdad.
ResponderEliminarMuy buena aportación, Tracy :-) y muchas gracias por participar con este texto donde hay mucha prosa poética. Me ha gustado.
Un beso.
Gracias por tus palabras Mag, me ha gustado que te hayas sorprendido con el final de la Farera.
EliminarYo te felicito por el éxito que has tenido con la convocatoria, señal de que ha gustado.
Un abrazote.
Son esos amores que matan... pero parece que cada cual ha conseguido estar donde finalmente quiere. Estupendo relato, Tracy. Me gusta especialmente la frase:
ResponderEliminar" A medida que iban ganando altura el paisaje se iba ensanchando, el mar se iba ondulando llegando a besar una y otra vez las tierras de la ribera con más fuerza".
Enhorabuena.
Una apreciación, esa de que cada uno está donde quiere, que ni siendo yo la autora del relato me he parado a pensarlo: sí, finalmente cada personaje está donde quiere estar, el farero no mucho pero cumplió heroicamente con su obligación.
EliminarGracias por el comentario.