Esta semana trataremos de buscar un protagonista de la imagen que se muestra, inventando una historia sobre él
La autora de la idea es San y en su blog podéis leer lo que escribamos.
VENDEDORA DE GLOBOS
Como todos los días, cansada de malvivir, se echó el alma a la espalda, cogió un manojo de ilusiones para vender y emprendió el camino desde el barrio de "las tres mil viviendas" hacia la Plaza de España.
Cada paso que daba, la acercaba a otro tipo de vida, parece que se fuera trasladando a un mundo sin miseria, ni problemas para subsistir. La gente parecía alegre, en su caminar dejaban rastros de historias perfumadas... Por un momento piensa que van a trabajar como ella, se quiere conformar, pero enseguida mira los globos y es consciente que lo suyo más que trabajar es mendigar, si pudiera volar con ellos y desaparecer...
El día gris no acompaña a ver las cosas de otra manera.
Se sienta en el bordillo de la acera, está hastiada de vivir, echa un vistazo a la Plaza, los pocos transeúntes que hay, no son público para su mercancía.
Piensa... "Es temprano para que los niños hagan su aparición, nunca se sabe... si hubiera suerte y los vendiera pronto... me podría ir a mi casa y dormir un poco antes de que comiencen los gritos y las peleas vecinales cargadas de vino..."
A lo lejos vislumbra una madre con una sillita de niño y aunque imagina que no le comprará ningún globo, ella pone en la mano del pequeño un Bob Esponja, la madre intenta quitárselo: el globo se escapa: "si me pudiera escapar con él..."
Empieza a desenredar las cuerdas que atan los globos y a soltarlos uno a uno pintando la plaza de lunares de colores, todos miran hacia arriba, los turistas hacen fotos, uno de ellos pone en sus manos un billete doblado.
Ella se sonríe agradecida... va a poder descansar antes de que la casa se llene de gritos, amargura y olor a vino recalentado.
Vengo leyendo los relatos juveros, eres la primera que menciona que se trata de la Plaza de España y la primera que se excede de las cien palabras. Lo primero estaba a la vista y lo segundo ha merecido la pena. Un abrazo
ResponderEliminarLa verdad es que no las he contado, desde aquí pido perdón por haberme saltado la regla de Tásalo a los Jueveros y también a ti.
EliminarQue lindo texto has creado aunque lleno tb de tristeza y realidad ...pero me quedo con las caras que pondrían esos niños a ver el cielo de colores por los globos que ella soltó pensando en irse quizás volando hacía un destino mejor.
ResponderEliminarPrecioso un beso y feliz día.
Un poco triste me ha salido, será que lo estoy y se reflejó en el relato.
EliminarEl milagro de los globos y los grises, se ha hecho posible. Y pudo hacerse en Sevilla, donde se puede dar cualquier milagro, sin necesidad de santo ni peana.
ResponderEliminarBrillante entrada. Enhorabuena, amiga.
Un beso.
Sevilla es un marco ideal para que suceda cualquier cosa.
EliminarGracias por tu veredicto querido Juan.
Lindo relato.
ResponderEliminarBesos.
Me alegro que te haya gustado.
EliminarUna triste historia... Pobre chica..
ResponderEliminar... pero tan real...
EliminarEs el personaje central de la foto, el mas rico para desarrollar una historia... En tu caso agridulce ya que no está satisfecha y así lo parece en a imagen también... Bien hecho 👌 besos!
ResponderEliminarEs que los demás personajes apenas se ven y ella en cambio ocupa el plano central de la imagen.
EliminarAhi está," no te pongas la tirita antes de cortarte", nuna sabes que pasará, interesante
ResponderEliminarbesos
Buena moraleja has sacado.
EliminarSin duda, esa imagen te ha llevado a crear una muy bella y profunda historia. De esas en las que quedarse con el alma en vilo… y pensar, perderse, quizá con esos globos a los que cortó los hilos…
ResponderEliminarMuy bueno, querida Tracy.
Bsoss enormes, y feliz tarde 😘
Gracias Ginebra, no sabes lo que agradezco tus palabras.
Eliminar"sonríe agradecida" ... su mejor momento del día.
ResponderEliminarUn bello y cruel relato, amiga Tracy. Me encantó
Un abrazo
Todos tenemos algún momentobueno al dóa pero para ella fue un momentazo.
EliminarUn abrazo
unos les gustaría volar con los globos, otros piensan "Tragarme tierra", otros se echan los tragos, también los hay que usan la jeringuilla, fuman, otros esnifan, el caso es tratar de evadir la realidad...
ResponderEliminarBesos y salud
¡Es que la realidad que tenemos...!
EliminarUff...qué tristeza,
ResponderEliminarqué oscuridad...qué malvivir...
pá 4 días de ná...
Besos.
...
Pues sí, pero hay mucha gente que desgraciadamente vive así.
EliminarUn relato hermoso con final feliz, aunque sea feliz por un día. te aseguro que lo necesitaba, Tracy.
ResponderEliminarMe ha encantado el relato y la foto que lo ha inspirado.
A veces también me gustaría volar y desaparecer por un tiempo.
Un beso,
Te comprendo, lo que `pasa es que hay casos y casos.
EliminarUn besazo.
Impresiona por lo real que puede ser ese relato. El mundo parece que no acoge igual a todos y por ello algunos sienten ganas de irse de él.
ResponderEliminarBesos.
Y tanto que es real, desgraciadamente. la vida es muy injusta.
EliminarLa historia de tantas personas que malviven.Triste pero real.
ResponderEliminarBuen relato,Tracy,hace pensar.
Besos.
No deseaba haceros pensar con mi relato, pero ya que ha sucedido, tampoco nos vamos a poner malos porque pensemos, jejejeje
EliminarTuvo un buen dìa, finalmente, esta vendedora de globos. Un buen momento inesperado, la sorprendió.Bien por ella.
ResponderEliminarUna historia que parece muy real.
Abrazos, amiga.
Al final logré sacarla del pozo, aunque no sé por cuanto tiempo.
EliminarUn cuento precioso que nos hace mirar a esa escapada vertical y ascendente con la que a veces soñamos. Cuando se ciegan los caminos, los cielos es la escapatoria. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarBesos.
Así es , MAESTRO.
EliminarUn abrazo
Es el personaje que ha inspirado tanto. ¿Quien será?
ResponderEliminarEl relato tiene un tono agridulce. Hay un momento de escape, de ilusión, con el retorno a esa realidad que tiene que sufrir.
Bien contado.
También yo he pensado en eso ¿quién será esa mujer?Seguro que si nos acercamos por la Plaza de España sevillana la conocemos encarne y hueso.
EliminarToda una historia dolorosa, aunque también esperanzada, de vida detrás de una postal. Muy creativa. El tema de la cantidad de palabras resultaba bastante limitante, se entiende. Un abrazo
ResponderEliminarEs que me pasó inadvertido, lo leí sin prestarle atención, creí que era una de las reglas de Tésalo de todos los jueves.
EliminarPerdón de nuevo.
A veces, por un instante, sucede un milagro. Los globos volando y un billete que facilita a la protagonista su merecido descanso. Duro pero muy bello, besos.
ResponderEliminarLoa milagros deberían de ocurrir más veces.
EliminarMuy ingenioso y emotivo tu micro, Tracy. Si esos globos pudieran rescatarla de la dura realidad.
ResponderEliminarAbrazo
Hay tantas vendedoras de globos por el mundo...
EliminarTe he leido y te he comentado, pero esto comenzó a hacer algo raro y no se no si quedó el comentario, en fin te decía que los milagros a veces existen y que tú se lo has hecho llegar a tu protagonista.
ResponderEliminarBesos Tracy y gracias por participar.
Gracias siempre a ti por dirigirnos tan requetebién
EliminarUn abrazo
¡Hola! Me gusta el relato, y que al menos, haya tenido ese momento de ilusión y entusiasmo cuando soltó los globos y el cielo se llenó de colores.
ResponderEliminarMuy bueno. ¡Un abrazo!
Esos momentos fugaces que a todos nos dan la vida.
EliminarAyer leía: la felicidad es un instante. Por suerte hay gente que tiene esos hermosos gestos, que hace que alguien lo pueda disfrutar alguna vez. Me gustó mucho.
ResponderEliminarcariños
Gracias Vivian.
EliminarUn beso
Me ha resultado muy conmovedora esta historia de la mujer de los globos, tan única en ese lugar imponente y seco, poniendo una nota de color en el paisaje monocromático, desentonando bellamente. Alguien lo noto y al menos puso un billete que le gano un descanso.
ResponderEliminarAbrazo juevero Tracy
Siempre hay gente buena hasta en los relatos.
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