Nos conduce Gustavo en su blog podéis leer hacia quien van dirigidos nuestros perdones.
Él nos ha contado que le surgió el tema al leer lo siguiente:
"Tras haber denunciado una señorita a su pareja por cuatro veces, en más de una de esas denuncias le perdonó. El resultado fue que el otro día la pareja masculina se la cargó delante de su hija."
TE PERDONO
¿Quién soy yo para perdonarte? Ni si quiera te conozco
¿Quien soy yo para perdonarte? Ni si quiera me conoces.
¿Quien soy yo para perdonarte? sin saber lo que tú sientes,
si ni tú mismo lo sabes.
No soy quien para juzgarte,
ni si quiera perdonarte.
¿TE PERDONO?,
son palabras vacías de contenido.
Prefiero decir: TE QUIERO.
porque lo siento y quiero morir diciéndolo.
Él nos ha contado que le surgió el tema al leer lo siguiente:
"Tras haber denunciado una señorita a su pareja por cuatro veces, en más de una de esas denuncias le perdonó. El resultado fue que el otro día la pareja masculina se la cargó delante de su hija."
TE PERDONO
¿Quién soy yo para perdonarte? Ni si quiera te conozco
¿Quien soy yo para perdonarte? Ni si quiera me conoces.
¿Quien soy yo para perdonarte? sin saber lo que tú sientes,
si ni tú mismo lo sabes.
No soy quien para juzgarte,
ni si quiera perdonarte.
¿TE PERDONO?,
son palabras vacías de contenido.
Prefiero decir: TE QUIERO.
porque lo siento y quiero morir diciéndolo.
El perdón no tiene fundamento si detrás no tiene otro sentimiento que lo sustente. Hemos aprendido la palabra... No la acción.
ResponderEliminarMuy bonita tu participación. Y cuánta pena da ese tipo de noticias.
Mil besitos Para tu día 💗
Estoy contigo que desde pequeñitos aprendemos la palabra y no la acción.
EliminarMe ha encantado
ResponderEliminarMe alegro, Buscador.
EliminarMe ha venido a la memoria un poema de César Vallejo, que en su parte final dice así:
ResponderEliminarY en esta hora fría, en que la tierra
trasciende a polvo humano y es tan triste,
quisiera yo tocar todas las puertas,
y suplicar a no sé quién, perdón,
y hacerle pedacitos de pan fresco
aquí, en el horno de mi corazón...!
Besos.
Maravillosas palabras las de César Vallejo.
EliminarY ahora permíteme una curiosidad:Cómo puedes tener en tu memoria trozos de poemas para comentar textos tan diversos? ¿cómo lo haces? y además es que vienen que ni pintados. Por muchas fichas bibliográficas que tengas lo que si debes tener es una memoria prodigiosa.Y luego te quejas y te haces preguntas " ¿d´nde fué?, ¿donde fué?" ¡Donde va a ir si lo tienes tó en tu cabeza!
Esos perdones deberían estar prohibidos, porque están influídos por unos sentimientos o unos miedos que deforman la realidad.
ResponderEliminarMucho más bonita tu aportación.
¿Quién puede perdonar?
EliminarSolo se puede perdonar desde el amor pero hay amores que duelen mucho y estigmatizan demasiado. Se puede perdonar pero también clamando justicia y no reblando.
ResponderEliminarUn beso enorme.
La justicia es la que tiene que decir la última palabra y los ciudadanos exigirla.
EliminarPER-DONAR...
ResponderEliminarLa palabra es sí tiene mucho que decir, pero hoy en día, no sé que pasa, que nos acostumbramos a pronunciarlas muy a la ligera y no las acompañamos con el sentimiento, con la actitud, con el equilibrio entre el decir, pensar y hacer.
Saber perdonar, y saber ser perdonado. Ahí es nada.
Mil besos, Tracy. Un buen tema, un buen escrito.
Estoy contigo en todo lo que dices y en la dificultad añadida, no sólo de perdonar, sino de sentirse perdonado.
EliminarUn fuerte abrazo.
que difícil el perdón, se lo confunde con el olvido y con el resentimiento... qué es entonces? el no tener rencores quizá...
ResponderEliminarlindo tema, saludos...
Leyéndote me has hecho recordar una frase que se suele decir mucho "yo perdono pero no olvido" y que no tiene nada que ver con el perdón.
EliminarYo, ese tipo de conductas, no las puedo perdonar, es más, ni me lo planteo.
ResponderEliminarTú como abuela le dirías te quiero al asesino de tu hija y a quien le destrozó la vida a uno de tus nietos? te aplaudo y felicito por ello, prima. Mi altruismo, no alcanza límites tales.
Y decirle/s te quiero a este tipo de personajes (por llamarlos de alguna manera), es algo que sólo le compite a Dios hacer, -que a mí, no- ya que pa eso está.
Eso sí, no me mancharía las manos de sangre... y menos por alguien que me arrancó la esencia, la vida, y mi ser como mujer.
Besos, Tracy.
Es lo que siento y pienso....
Mi altruismo no alcanza esos límites ni con mucho, pero no ya referido a mi gente sino a la vecina del quinto de tu bloque parisino.
EliminarSólo quise decir que ¿quién tiene en sus manos el poder de perdonar? será Dios, porque yo no.
¡Que sabe nadie, como son las personas, cuales son sus sentimientos, cual es su locura...!
Lo único sobre lo que yo sé , es sobre mis sentimientos y mis locuras, por eso puedo decir "te quiero o no te quiero" y no puedo decir "te perdono", refiriéndome en general a cualquir persona.
Quizás no lo supe explicar medianamente bien, incluso ahora no sé si queda claro lo que quiero decir.
Sé perfectamente lo que piensas y lo que sientes y en este tema como en algunos otros vamos al unísono.
Besos "sentíos".
Perdonar es difícil cuando se hace de corazón... siempre lo he pensado así, se puede pero cuesta
ResponderEliminarO se hacede corazón ¿o para qué?
EliminarNo admito cierta clase de perdones ni los entiendo.
ResponderEliminarMe encantó lo que has escrito, muy bonito
Abrazos de otoño caliente.
Sobre todo porque no sirven para nada.
EliminarHay perdones imperdonables. Me quedo con el te quiero.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo también me quedo con el te quiero, sobretodo porque es un sentimiento mío.
EliminarSin perdón no hay paz. Creo que cuando nos piden perdón de verdad, y no hablo de esos matones que tras cada paliza piden perdón con lágrimas d cocodrilo, se ha de perdonar, por liberar el peso de esa afrenta.
ResponderEliminarUn abrazo
El perdón hay que pedirlo a otras instancias.
EliminarEl perdón sino es sincero es mejor no decir nada ..pues lo reproches veces son peor que un mal perdón..
ResponderEliminarHay algo que se dice que el final de nuestros días todos deberíamos perdonar y ser perdonados !!!..
Un abrazo .
Sí, lo que se dice revisar nuestras cuentas con Dios, con la Vida, contigo misma o con tu credo.
EliminarBesos
Como siempre un excelente relato.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Tracy
Muchas gracias Josep.
EliminarPerdón es una palabra vacía la mayoría de las veces.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo.
EliminarPuedo disculpar, el perdón no me compete a mi, ademas nunca repara el roto. Abrazucos
ResponderEliminarEso piendo yo que el perdón no está entre nuestras competencias, el amor sí.
EliminarEs que hay formas de querer que tienen más que ver con la adicción. Primero hay trabajo en aprender a querernos nosotras mismas. Besos.
ResponderEliminarEl de querernos a nosotras mismas es un trabajo arduo porque no nos enseñaron a hacerlo, pero unca es tarde y cuando lo conseguimos aprendemos, entre otras muchas cosas, que el perdón no es nuestro cometido.
EliminarPerdonar es olvidar la ofensa
ResponderEliminarY se olvida no pensando mas en ello
Besos
¿Estamos hablando de qequeñas cosas? porque las gordas no somos nosotros quienes debemos perdonarlas.
EliminarEs difícil creer en el esa palabra.
ResponderEliminarMe gustó tu relato.
Yo no creo en absoluto a no ser en nimiedades que no van a ninguna parte.
EliminarSiempre es un placer encontrarte por aquí.
Besos
En el caso concreto del que se habla arriba, lo siento pero no cabe el perdón. Lo único que cabe es que pague en la carcel su crimen. Si cree en Dios... que le pida a Él su perdón en la otra vida.
ResponderEliminarNi cabe el perdón , ni somos quienes para perdonar.
EliminarHay conductas que no se pueden tolerar. Hay conductas que no se deben perdonar.
ResponderEliminarBesos.
Estoy de acuerdo, pero es que mi criterio va más allá, es que no somos quien para perdonar, que las perdone Dios o aquel Ente en que se tengan puestas las creencias.
EliminarMe gusta más la segunda parte, en la primera no hay perdón ni arrepentimiento. Una pena.
ResponderEliminarYo también soy más de querer.
EliminarPues lo del perdón me lo tengo que pensar mucho... :)
ResponderEliminarSalud y besos
No pierdas ni un minuto en pensártelo porque no entra dentro de tus competencias.
EliminarHola Tracy: Algunas veces se puede, pero además hay que perdonar la afrenta y olvidarla después. Pero existen cosas que jamas se olvidan.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Las pequeñas cosas de cada día, son tan poco relevates que o hay porque utilizar si quiera la palabra "perdón", y las grandes cosas esas que tú dices que jamás se olvidan no nos corresponde a nosotros perdonarlas, es cosa que se resuelve a más altas instancias.
EliminarUn beso ¿Cómo sigues?, sabes que te quiero aunque no nos veamos.
Perdón cuando hay arrepentimiento.
ResponderEliminarMuy buena tu aportación.
Besos enormes.
Besos enormes para ti también.
EliminarMuy buena, el perdón no sirve de nada en estas circustancias, es hueco y sin alma, sobretodo si el hombre.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo.
EliminarTu aportación va para un lado interesante. Bien planteado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, daría mucho de qué hablar, pero este no es el foro adecuado.
EliminarBesazo
El amor no implica sometimiento, menos ante la violencia. A veces la víctima comparte la culpa con su victimario. Un abrazo
ResponderEliminarMuy interesante tu comentario que da para otro relato.
EliminarUn poema precioso, con mucho sentimiento y mucha razón. ¿Quiénes nos creemos para perdonar? Es mejor estar siempre dispuestos a ayudar a las personas.
ResponderEliminarUn besazo, Tracy
o al menos lo creo así.
EliminarBesos
Creo que hay por ahí un dicho o canción que dice que "amar significa no tener que decir nunca lo siento". Si amamos de verdad, no cabe sitio para lastimar, de ahí que no tengamos que disculparnos nunca.
ResponderEliminarPero me temo, que eso es una utopía.
Bss.
Esa frase se decía en una peli de los 60-70 Love Story
EliminarCreo que lo primero hay quererse uno mismo, y desde esa perspectiva, quizás seamos capaces de comprender al otro, y aprendamos a perdonar al hermano. MI madre decia siempre que la caridad empieza con uno mismo. Saludos cálidos.
ResponderEliminarY también hay otro dicho "por la caridad entra la peste", pero ese ya es otro tema.
EliminarUn besito Montse.
Ais :)
ResponderEliminar;)
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