Tema elegido por una paisana, Mª José, no podía ser de otra forma aquí os dejo su enlace por si queréis ver que se cuece en ellos http://www.mjmorenodiaz.com/
EL PATIO CORDOBÉS
Desde mi más tierna adolescencia era consciente de la belleza de estos recintos que hacían el papel de ágora de las casas vecinales. Se visitaban por Mayo, aunque no tenían el tirón turístico actual, lo que permitía bailar unas sevillanas en aquellos que ponían música. Hoy eso es impensable.
No puedo cantar con Machado aquello de:
"Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla" (ni de Córdoba)
"Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla" (ni de Córdoba)
Sin embargo recuerdo "salir de patios" con la pandilla y hacernos nuestro propio itinerario, que hoy ya está hecho con su explicación y todo, como si hubiera mucho que explicar... sólo hace falta dar rienda suelta a los sentidos, emborrachándote de olores y colores, de trinos y cantos de canarios que desde sus jaulas dan la bienvenida a los visitantes, mientras echas un trago del botijo, colgado a la sombra, que refresca las temperaturas que te acosan, ya, en estas fechas de primavera.
A una que siempre le ha gustado escribir sus cosillas, le han asaltado las ganas de pedir asilo en alguno de estos patios, para sentarme en un rincón, fuera de estas bullas, y escribir o dibujar el mundo que pasa ante mí, que sin duda visto desde aquí debe alcanzar otra dimensión.
Todavía se puede producir el milagro.
A una que siempre le ha gustado escribir sus cosillas, le han asaltado las ganas de pedir asilo en alguno de estos patios, para sentarme en un rincón, fuera de estas bullas, y escribir o dibujar el mundo que pasa ante mí, que sin duda visto desde aquí debe alcanzar otra dimensión.
Todavía se puede producir el milagro.
El milagro...bajo el embrujo de un patio cordobés...
ResponderEliminar; )
Me iba pero ya!
Bssss
Aún estás a tiempo, te queda una semanilla.
EliminarSon alucinantes los patios. Siempre que voy por Andalucia, no dejan de sorprenderme.
ResponderEliminarSí, además cada uno de ellos es un mundo y no se hacen para nada repetitivos.
EliminarSeguro que te prestan una silla baja y te puedes sentar a escribir o a escuchar. Son magníficos, oasis frescos y bellos. Un abrazo
ResponderEliminar¿Tú crees?, sus dueños están tan atareados en regar las macetas que no tienen tiempo de leer mi deseo en el blog, jejejeje
EliminarNo hace mucho,los Patios Andaluces fueron declarados como Patrimonio de la Humanidad. Es maravilloso ver las macetas colgadas en la pared y todo su entorno ajardinado.
ResponderEliminarSí y desde luego se lo merecen y más la gente que los cuida, que generalmente es gente bastante mayor.
EliminarAvisame y me voy contigo y me pongo en la otra esquina, para no molestar, para pintar e intentar plasmar en el lienzo el canto de los canarios.
ResponderEliminarCuando se escribe bien el que lee lo siente, y he sentido esa bulla de los patios. Te recuerdo que me avises si ocurre el milagro...
Un beso.
Tranqui, que lo haré.
EliminarClaro que puede producirse, tan sólo pídelo y verás.
ResponderEliminar:)
¿Con el follón que tienen? no me dejarían en él aunque estuviera más quieta que una maceta, mira, me ha salido un pareado.
EliminarYa quisiera que nuestro día de la cruz se pareciera en una milésima parte a vuestros patios.
ResponderEliminarSaludos
Las Cruces son otra cosa, también aquí.
EliminarA mi siempre me despierta inmensa curiosidad, sus patios, sus flores :)
ResponderEliminarSobreodo sus cuidados para estar tan floridos con las altas temperaturas que estamos teniendo.
EliminarAlgún día los visitaré.
ResponderEliminarBesos, Tracy
Que sea más pronto que tarde.
EliminarNunca he ido a verlos y me parece que no iré me agobia tanta gente pero lo que veo en imágenes me parece una maravilla.
ResponderEliminarUn abrazo
Durante la semana no hay tanta gente, se visitan con tranquilidad.
EliminarTe apoyo en lo del milagro. Luego me invitas a tu rincón.
ResponderEliminarUn beso.
¡Vale!, ya sois dos los que queréis que os invite.
EliminarAgua y lujuriosa vegetación, hedonismo puro.
ResponderEliminarTú lo has dicho, puro hedonismo.
EliminarCOLORIDO, BELLEZA, TRINOS AROMAS. RNHORABUENA POR TENER CERCA ESAS DELICIAS.
ResponderEliminarBESOS.
Nadie elige donde nace y a veces es un privilegio nacer donde se nace.
EliminarEsos maravillosos patios... :)
ResponderEliminarBesos y salud
Besos y salud.
EliminarA mí también me han dado ganas!
ResponderEliminar=)
¿A quién no?
EliminarTodo lo que se masifica pierde encanto, pero gana en popularidad y en repercusión económica.
ResponderEliminarBesos
Es la pescadilla que se muerde la cola, sin embargo se puede evitar la masificación yendo a visitarlos entre semana.
EliminarEspero que estés mejor. Un abrazo
Algunos vi cuando estuve en Córdoba hace poco. Estaban en pleno trajín preparando esa ruta.
ResponderEliminarUna maravilla de los sentidos.
En mayo es su mejor época, aunque siempre son dignos de verse.
EliminarMágicos esos patios...
ResponderEliminar...sobretodo los de antes...
Besosss!!
Cada cual tiene se encanto.
EliminarIntuyo bichos con tanta flor.
ResponderEliminarLástima.
Besos.
No vivo cerca de ellos pero mosquitos sí que debe haber.
EliminarCierto, Tracy. Cosas sencillas, yo casi me las pierdo. Todavía sueño, ahora, con esa imagen de mi abuelo sentado en un rincón del salón, leyendo su libro mirándome por encima de sus viejas gafas y, ay, esas sillas en la puerta de la casa que eran las verdaderas redes sociales de la era.
ResponderEliminarGracias por darnos este gustazo de recordar la belleza de esos antiguos patios y la bella soledad que podían ofrecer en cada momento que lo necesitábamos.
Los recuerdos se agolpan en estos lugares.
EliminarNunca he estado en esos patios pero debe de ser mágico
ResponderEliminarBesos
Raquel
http://raqueljimenezbisuteria.blogspot.com.es
Tú sacarías mucha inspiración para tus creaciones.
EliminarQué bonito patio el de la foto.
ResponderEliminarUn beso.
¡Ay tantos...!
EliminarEs una gran suerte visitar un patio andaluz...Los extranjeros se mueren por ello,nosotros los tenemos cerca y los valoramos.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo, Tracy.
M.Jesús
Un placer colaborar con este tema que has propuesto.
EliminarUna explosión de color, vida y belleza...tiene que ser impresionante.
ResponderEliminarUn beso.
Pues coge la moto y ven a verlos.
EliminarPues amiga, disfruta de esos patios y, si puedes escribir o pintar en uno de ellos, seguro que el resultado tendrá una magia especial.
ResponderEliminarBesos.
Te haré caso cuando se pase la bulla.
Eliminarni pueblo, y parece mentira, lo digo por ser eso, pueblo, no te puede ofrecer lo que anhelas en este escrito. ¿por qué? sencillamente por que es monocromático: verde y verde de cereal en este tiempo...
ResponderEliminarmedio beso.
Un placer tenerte por aquí, Gus
EliminarOtro medio beso para ti.
¡Sin duda, Tracy! Los milagros todavía se dan, de vez en cuando.
ResponderEliminarMuchos besos, y que sigas disfrutando de tan lindo lugar.
Te agradezco la fe que tienes en que en mí se hará el milagro.
EliminarQué bello relato... Característico, floral y sensitivo... Me encantó!
ResponderEliminarBesos muchos Tracy!
Celebro que te gustara
EliminarUn abrazo.
No pierdas las esperanzas, tú los tienes más cerca. Aquí no hay de esos patios que cada uno ha descrito.
ResponderEliminarAsí, que yo también tengo ganas de pedir asilo….
Cariños….
Tomo nota y lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarun beso
Bonitos patios. Cuando estuve en Córdoba, visité algunos.
ResponderEliminarBesos.
Estoy completamente seguro, que el día menos pensado, mas pronto que tarde, nos mostraras una entrada en la que serás protagonista dese uno de esos patios.
ResponderEliminarY seguro que la disfrutaremos.
Un abrazo.
Yo te acompañaría gustosa y disfrutaríamos de esos olores y vistas y con nuestro cuaderno de dibujo lo impregnaríamos de esas vivencias.
ResponderEliminarUn abrazo
Una gran idea, acomodarse entre la sombra de sus flores y observar como la vida pasa a alrededor, para luego plasmarla en papel.
ResponderEliminar¡Mis macetas son una birria al lado de esas preciosidad!
ResponderEliminarSalu2, Tracy.
Tracy, te daré algo de sana envidia. El pasado año, una amiga juevera, Susurros de Tinta, se desplazó a Córdoba durante los patios junto con muchos amigos suyos para ver una obra de teatro. Yo les hice de cicerone y guía, pero la sorpresa me la dieron ellos en la Plaza de las Tazas, donde en un patio precioso nos tenían preparada una suculenta comida, gentileza de sus moradores, a la sombra de dos frondosos árboles. Una auténtica experiencia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Era frecuente ir con la pandilla de patios cuando la fiesta no había adquirido esa fama y todo era más localista. Ahí aprovechábamos para beber"algo" y poner en practica nuestros bailes de sevillanas, oxidados de todo el año y que teníamos que lucir en la feria. Nuestros patios...qué recuerdo.
ResponderEliminarGracias Tracy por estar este jueves. Un beso
Sabes cuantas veces canté con emoción "mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla"? pues como si fuera cierto.
ResponderEliminarcariños
Todavía no he tenido oportunidad de verlos pero después de leer vuestros relatos me están entrando muchísimas ganas!
ResponderEliminarEn efecto Tracy, debe ser maravilloso disfrutar de un patio fresco y florido. Algo que ya sólo está al alcance de pocas personas. Y seguro que son un lugar ideal para despertar a las musas escribiendo maravillosos relatos o leyendo encantadores libros.
ResponderEliminarRecibe un fuerte abrazo
He tenido oportunidad de vivir y perderme durante unas horas en esa dimensión que cuentas con tanto conocimiento y pasión.
ResponderEliminarTan sólo unas horas y quedarán para siempre, especialmente esa soledad elegida tan estimulante.
besos
Estoy totalmente de acuerdo contigo, mi arma! Yo también disfrutaría en cualquiera de esos patios, oyendo el cantar de los pájaros, el sonido del agua de alguna fuente o simplemente dibujando. El silencio también se agradece!
ResponderEliminarSon magia pura... y una fiesta para los sentidos...
ResponderEliminarYa te imagino ahí, arrebujadita y en plena contemplación.
Besos, linda.