por haberos hecho esperar tanto para compartir lo que quizás vais a considerar una nimiedad aunque para mí haya sido un revulsivo muy potente, bonito, tan lleno de emociones, recuerdos, añoranzas y a la vez repleto de esperanzas.
Tenía que parar.
Ha sido algo muy especial, es la primera vez que me pasa, me acordé de Juan cuando escribió en uno de sus poemas sobre aquel tiempo en que "todo era la primera vez". para mí ha llegado esta primera vez tarde, pero me ha gustado vivirla.
No quiero irme por las ramas encima de lo difícil que me resulta explicarme para que me entendáis aunque sólo sea un poquillo.
Quizás todo esto se deba a esto que llegó anoche a mis manos: No estoy loca, soy Tauro y os hablo del 20/21 de abril 2024
"la llamada conjunción Júpiter-Urano en Tauro el 20 de abril de 2024. Esta conjunción es algo especial, ya que los dos planetas no han estado juntos en Tauro desde 1941".
"Júpiter y Urano están en conjunción cada 12 o 14 años, pero esta es la primera vez en 83 años que se juntan en Tauro y Por último, Tauro está conectado con Venus, el planeta del amor".
Este preámbulo lo hago porque creo ver la influencia que tuvo en este follón de emociones, sensaciones, estados de ánimo que he sentido en estos dos días.
No sé si recordáis que hace dos meses murió el último hermano de mi marido. Sus hijos decidieron enterrar sus cenizas en el cortijo de los abuelos paternos. Todos decidimos ir con nuestros hijos y sus respectivas familias, como homenaje a los seis hermanos y a los abuelos.
El pronóstico del tiempo era pésimo de frío, tormentas y lluvia, pero nos han hecho dos días maravillosos en los que el valle estaba precioso,
No conozco a nadie más que a ellos que tengan más arraigada su tierra y se la haya inculcado a la familia que formaban.
Reflexión: tengo que llevar a mis nietos a que conozcan Ceuta, a nuestras hijas las llevamos,
¿De motu propio o inducida por su padre?
Los caminos solitarios y en un silencio sólo roto por el sonido de los cencerros de las ovejas que hasta tienen su encanto en una dehesa que lucía en todo su esplendor y en la que ahora se escuchaban juegos, voces, risas, conversaciones y relatos de recuerdos.
Cercas de granito hechas en tiempo inmemorial, característica de esta zona, donde corretearon los padres de estos que ahora son adultos que ya tienen el testigo de la madurez y acompañan a sus hijos, los nietos y biznietos de los que comenzaron la saga.
Unos de ellos han conocido a los nietos, otros como en mi caso, no. Hoy estamos los que quedamos algunos venidos para la ocasión porque viven en Boston y Suiza, pero lo que es la sangre, parecía que habíamos estado juntos y de copas la noche anterior.
En total cincuenta personas, a pesar de que algunos por motivos justificadísimos no pudieron estar.
Eso comentaban mis hijas que a pesar de lo poco que han estado juntos, sólo en las vivencias de pequeños, y luego en las bodas que ha habido en la familia, tienen el mismo trato, confianza y chanzas que con sus amigos de charpa diaria.
El hilo conductor: estos árboles, donde se quiera o no, están sus raíces.
Conclusión : ya han puesto fecha para hacer "una primada", la del próximo año, será el 26 de Abril, sábado.
Alegría de que estos encuentros se prolonguen en el tiempo y pena porque... de las "cuñás"... ¿Cuántas asistiremos? estamos en la primera línea de tiro...
Cambio de tercio:
El campo parecía un parque temático, con niños de todas las edades
estos son parte de los adolescentes.
Todos bajamos a la exhumación, desde los más pequeños hasta los mayores. está bien lo de llevar a los chicos, así se van familiarizando con la parca en plena naturaleza exuberante de aromas y colorido. Fue muy emocionante.
Me imagino que todos pensamos en los que ya se fueron, a mí se me removió todo por dentro, pensando que al padre de mis hijas le hubiera gustado esa despedida y en ese lugar, pero a ninguna de las viudas se nos ocurrió, como luego hablamos.
Fue un acto muy emotivo en el que el silencio volvió al valle pero llenándolo de amor y nostalgia.
Cuando acabamos el acto, la larguísima mesa estaba preparada con las viandas serranas: embutidos, jamón y una inmensa paella y a pesar de venir con la boca amarga, enseguida nos pusimos a la mesa. ¡Como somos los humanos...!
Siempre he envidiado el sentido "lúdico" que la familia de mi marido le daba a la muerte, para mí lo quisiera, de verdad es de admirar. quizás por eso en lo de mi marido no hubo "jolgorio" y ahora me pesa.
Pensamientos míos...
Hubo su momento fotos, divertidísimo
Carreras de Quads y motos. Antes lo que hacíamos era carreras de bicis, ¡Como se nota a la velocidad que va la vida!
O quizás nosotros, la vida sigue igual como decía Julio Iglesias.
Me acordé mucho de mis nietos que no vinieron porque Pol cuando salió de la Neumonía se rompió un pie y está escayolado. Me dio mucha pena porque ellos, sí que no conocen a sus primos y no habían nacido la época de las grandes quedadas.
Sentires de arrepentimiento por no haber querido volver desde que él murió. ¡¡¡Qué fuerte!!! Hasta ahora no podía pronunciar ni poner esa palabra.
Un rato de lluvia fuerte que nos metió en la casa y al amor del fuego fuimos contando "sucedíos", de cuando estábamos jóvenes y veníamos a ver a los abuelos y de las andanzas de los hermanos por estos campos, algunas en tiempo de los maquis, ufff... hubo lágrimas con risas y risas con lágrimas, que aunque parezca igual, no es lo mismo.
Esa es nuestra mejor herencia.
PD. Esta noche desde la 1,49 de la madrugada podéis ver la Luna Rosa de Abril
Un encuentro familar precioso. Qué alegría sentir y saber que sois una colmena enorme, con visos de seguir creciendo y gozando de veros de tarde en tarde todos, recordando a quienes ya partieron.
ResponderEliminarEn el 2019 nos reunimos 112 descendeintes de mi bisabuela paterna, famosa en Plasencia por ser la abanderada de las mujeres que socorrieron a los vencidos de la guerra de Cuba, que regresaban enfermos de la odisea. Fueron, lideradas por ella, al tren que los traía hacia el sur. No hubo paella, pero vino el Alcalde y la tele :-). Comimos muy bien, y homenajaamos a sus nietos, 9 aún vivos, mi padre no. Por las raíces, Tracy. Un abrazo.
¡Por las Raíces!
EliminarMuchísimas gracias por haber compartido esa historia tan emocionante de tu bisabuela paterna.
Todo un orgullo tenerla en la familia. ¡Cuánto tenemos que aprender de aquellas mujeres...!
Ojalá sigamos muchos años participando en vida de esas reuniones familiares.
Un abrazo muy fuerte
Buen fin de una fiesta que puede continuar en cualquier momento.
ResponderEliminarSaludos
Pero ya sin tantas emociones , que si no , me voy a morir antes de tiempo.
EliminarTracy, solo gracias, por compartir tu historia. Besos, muchos.
ResponderEliminarGracias a ti, por venir sólo a agradecer que lo haya compartido.
EliminarMil besos
Precioso post, Tracy. Muy emotivo debió resultar el encuentro y el recuerdo a los ausentes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Llevaba mucho tiempo sin saber de ti. Te agradezco que sea precisamente en esta entrada en la que has aparecido.
EliminarAún me dura la emoción.
Abrazo fuerte.
Un precioso lugar, para comprobar, que en esos campos de tus raíces, nacen bellas flores de recuerdos y vivencias.
ResponderEliminarEsas horas vividas, vienen a recordar que la vida vale la pena, tanto, que has ta la luna se asoma, con comezones de envidia.
Tu entrada, tan bien escrita, se viste con ropajes de ternura.
Besos.
Fue todo muy emotivo, no te reponías de una emoción, cuando te venía otra. Esos de ver tantos hombres y mujeres, con sus hijos...ellos estarían contentos que ha salido de "todos los primos", sin ser inducidos por nadie , el montar este follón, cuidando hasta el más mínimo detalle, hasta sacaron el tablao para bailar sevillanas.
EliminarTe recordé por aquello que decías de las primeras veces y te diré que siempre existe primeras veces, emocionantes de verdad, como esta lo fue para mí. Ya, que me estoy emocionando
Gracias por tu comentario, y sí , la vida vale la pena vivirla con sus pros y sus contras, de todo se sacan enseñanzas y yo ayer saqué muchas para seguir viviendo.
Un fuerte abrazo
Cuánta emoción Tracy! Gracias por compartirla con nosotros que vivimos con tus palabras todo lo que vos, lamento lo de Pol y su mala pata, ya saldrá, un abrazote grande!
ResponderEliminarLo de Pol, ha tenido muy "mala pata", vamos a tomarlo a broma, porque así se suaviza la cosa, ni su padre, ni su hermanos pudieron venir y se les echó de menos.
EliminarEn fin... las cosas hay que tomarla como vienen.
Gracias por venir y unirte a esos días tan especiales vividos.
Un beso muy fuerte.
Una maravilla, sobretodo para los solitarios.
ResponderEliminarSalud
Solitarios o no, todos nos reconfortamos unos a otros, porque a todos nos faltaba algo. Como la vida misma.
EliminarQué maravillosa reunión familiar, conmemoración y día de campo, un precioso día de encuentros y de emoción... y qué bonito lo has contado, tan entrañable!
ResponderEliminarUn abrazo
Lo he contado lo mejor que he podido , esperando que me hayáis comprendido porque era muy difícil describirlo, para que sintiérais a la par mía.
EliminarCreo que todos podemos sacar consecuencias positivas, yo la primera, y vivir la vida aprovechándola a tope y darle valor a lo que realmente lo tiene.
muchos besos
Tracy, las raíces familiares nos emocionan siempre...Comprendo tu estado después de vivir tal convivencia en plena naturaleza con tus familiares y el recuerdo inolvidable de tu esposo siempre presente...Comprendo tu arrepentimiento de no haber vuelto antes. La oportunidad ha llegado y la has aprovechado muy bien...También en mi familia paterna tenemos un "clan familiar" de ciento y pico miembros, porque tengo ocho tíos y cuarenta primos con sus hijos, mis tíos ya no viven. Nos hemos reunido muchas veces a celebrarlo...Gracias por compartirlo y contarlo tan bien, ello te honra y refleja tu humana generosidad, Tracy.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz día.
He disfrutado leyendo a Albada y ahora leyéndote a ti y sintiéndome parte se esas familias que os reunís durante tantos años. ES la única forma de mantener esos lazos familiares que tal como corren los tiempos, sería imposible mantenerlos unidos.
EliminarY lo mejor que los más pequeños vean esas costumbres para que ellos la sigan teniendo, cuando los mayores vayamos desapareciendo. En esta ocasión se han encargado los hijos de aquellos que faltan y que ya tienen hijos en edad de tomar el testigo.
Feliz Día del Libro, que con unas cosas y otras no quiero que pase desapercibido
Un abrazo muy fuerte.
Perdonada estás, pero con tal motivo, lo que hay que hacer es felicitarte y que os podáis reunir mas a menudo.
ResponderEliminarOjalá!!!!!!
EliminarQué alegría me da leerte hoy, Tracy, eres vida, ejemplo y pasión por los tuyos. Admirable. Me encanto que lo compartieras con nosotros.
ResponderEliminarGracias.
¡Pues sí! estabas en los spams, he ido y te he rescatado, para que veas que no estás tan mayor, sólo que dices unas cosas tan bonitas que a Blogger le gustan y se las queda.
EliminarGracias mil, Enrique.
Cuánto me alegra saber que has disfrutado de lo lindo, que esas reuniones te hagan feliz y que tengas la generosidad de compartirlas. Espero que la noticia de lo bien que he pasado mi revisión de los seis meses, aumente tu alegría.
ResponderEliminarUn abrazo y no dejes de disfrutar la vida.
¡Qué alegría más grande me has dado con lo de tu revisión, mucho más que mi fiesta familiar, porque ara mi las enfermedades son un punto y aparte y la salud está por encima de todo.
EliminarAsí es que le has puesto la guinda a mi día.
Sigue cuidándote y verás como todo sigue un buen curso.
Un abrazo con millones de besos arracimados con mis felicitaciones.
¡Muchas felicidades, Tracy, para ti y familia!
ResponderEliminarPrecioso y entrañable encuentro, y la mejor herencia, como dices: la nave nodriza. Muy bonito, gracias por compartirlo.
Que Pol se recupere pronto.
Muchos besos fuertes, querida Tracy, con mucho cariño.
Roa, no sabes lo que me alegro de verte por aquí porque sé que valoras mucho estas reuniones familiares, aún me acuerdo de las que contabas con tus primos y cantábais. Como ves no se me olvidan las andanzas de mis amigas.
EliminarGracias muchas por venir sobre todo hoy, me imagino que tienes poco tiempo y es de agradecer que hayas buscado un huequito para venir a visitarme.
Un beso muy, muy fuerte.
Qué maravilla de encuentro y que bien documentado. Me he emocionado.
ResponderEliminarA mí al escribirlo también, ha sido como una catarsis que ha cumplido su misión.
EliminarUn abrazo con todo mi cariño.
No sé qué tiene ese 20 de abril que hasta Celtas Cortos le hizo una canción. Algo tendrá el agua cuando la bendicen.
ResponderEliminarLa familia tira mucho.
Conozco la canción y un Bar que hay en la zona este de Málaga que se llama así, precisamente por la canción de los Celtas Cortos.
EliminarLa familia es nuestra tribu ¿no va a tirar?
Un abrazo
Una convivencia inolvidable y espectacular. Los felicito.
ResponderEliminarUn abrazo
Desde luego no se nos olvidará.
EliminarMuchas gracias por tu felicitación.
Besos
Qué bonito y qué emotivo!!!
ResponderEliminarSí, realmente lo fue, un día de los que marcan.
Eliminar¡Querida Tracy! Leí ayer tu entrada pero no pude escribir nada porque lo narraste tan extraordinariamente que me emocioné mucho recordando las reuniones familiares que mis abuelos siempre preparaban, también en el campo. Mi bisabuelo se apuntaba a todas y guardo gratísimos recuerdos de aquellos reuniones. Cierto, la mejor herencia.... muchos besos
ResponderEliminarMaite me alegro mucho de que mi experiencia te haya servido para recordar la tuya, porque me imaginación en ambas estaba servida, en la tuya por ser los mayores los que proponían la reunión, y en la nuestra por ser los jóvenes quienes la propusieron.
EliminarUn beso muy fuerte, Maite querida.
Juraría haber escrito aquí un comentario. Estoy mayor, Tracy.
ResponderEliminarPues se lo habrá tragado Blogger. Miraré en los spams.
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