Es Dorotea la que nos conduce a través de la realeza ficticia o real, se nos pide que hablemos de personas, animales o cosas que ostentan este título. Si queréis leer lo que hemos escrito:
pichad aquí
El Rey desde la retaguardia divisa todo cuanto se mueve en el campo de batalla.
Sus prerrogativas subrayan las diferencias que existen entre él y sus súbditos pero, aunque a regañadientes, son aceptadas por ellos.
Él, desde su altivez, cree que manda pero sus movimientos están siempre restringidos.
A su lado siempre la Reina, la que verdaderamente tiene libertad de movimientos y pasea contoneándose por el tablero de arriba hacia abajo, de derecha a izquierda y en diagonal entre las torres, alfiles, caballos y peones, sabe que el jaque mate no se lo darán a ella, sino al Rey, pero a pesar de eso, todos sus ardides van encaminados a su defensa, al fin y al cabo está defendiendo su bicoca.
Así es el juego del ajedrez, como el mismísimo juego de la vida.
Él, desde su altivez, cree que manda pero sus movimientos están siempre restringidos.
A su lado siempre la Reina, la que verdaderamente tiene libertad de movimientos y pasea contoneándose por el tablero de arriba hacia abajo, de derecha a izquierda y en diagonal entre las torres, alfiles, caballos y peones, sabe que el jaque mate no se lo darán a ella, sino al Rey, pero a pesar de eso, todos sus ardides van encaminados a su defensa, al fin y al cabo está defendiendo su bicoca.
Así es el juego del ajedrez, como el mismísimo juego de la vida.
Pues que interesante :3
ResponderEliminargracias por tu visita
saludos^^
;)
EliminarHasta que no llegue un caballero a caballo, portando una bandera de tres colores que dice libertad y los manden a los sotanas de la historia, junto con sus bicocas y regalías.
ResponderEliminarBesos compañeros.
¿Tú crees que eso lo veremos?
EliminarLa segunda partida de ajedrez juvera, me parece un planteamiento original. Abrazo
ResponderEliminarCoincidencias que en el desarrollo se separan.
EliminarBueno en la vida las cosas no son tan bucólicas para las reinas ( ni los reyes) en mi opinión.
ResponderEliminarEn el ajedrez es más interesante...
Besos.
Eso siempre: el ajedrez es mucho más interesante.
EliminarBuen relato.
ResponderEliminarAcabo de acordarme del torneo de ajedrez de mi hijo... la inscripción!!!
Me voy corriendo... Besossss
¿Llegaste a tiempo a la inscripción?
EliminarMuy sutil manera de plantear tu crítica jeje. Muy bueno.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo!
Jajajaja cómo nos vamos conociendo...
EliminarBuenas amiga , vaya hoy ya he visto dos partidas y muy buenas las dos , espero que el jaque mate haya quedado en tablas ... la verdad que la vida podría ser perfectamente una buena partida de ajedrez .
ResponderEliminarUn besazo y feliz jueves.
Aunque las dos son partidas de ajedrez, cada una de ellas va por su derrotero, jejejeje
EliminarQué bueno. Así es, un buen ejemplo de la vida, sin duda…
ResponderEliminarCuando era pequeña, mi hermano me enseñó a jugar; pasábamos horas frente a ese tablero. Recuerdo el tacto de las fichas, incluso el olor al abrir aquella caja donde se guardaban…
Gracias por traerme ese recuerdo, mi querida Tracy.
Bsoss enormes, y feliz finde!
¡Qué bonito y entrañable los recuerdos que cuentas!
EliminarReyes del tablero, que coincidencia con mi relato.
ResponderEliminarSalvo que la reina de tu ajedrez está más concentrada en sus intereses.
Un abrazo.
Un honor haber coincidido con el gran Demi en el tema, aunque como dices bien los desarrollos son distintos, jejejeje
EliminarUn abrazo Demi
jajaja, sí pero hasta a la Reina se la pueden deglutir :-)
ResponderEliminarBesotes
Llevas razón, me ha gustado ese verbo "deglutir", jajajajaja
EliminarNo he jugado mucho al ajedrez aunque la vida de uno de mis mejores amigos gira en ese mundo, bastante más interesante de lo que podemos imaginar. Tu entrada me parece de lo más original, y es cierto como la vida misma, besos.
ResponderEliminarEstoy rodeada de ajedrecistas hasta mi nieto el chico juega y desde luego a todos les encanta jugar.
EliminarA menos que se trate de los reyes de la baraja... ojito que te envian al Constitucional en un plis plas!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y buen fin de semana
Jajajaja
EliminarAnoche el blog se negó a dejarme contestar a vuestros comentarios, ¡ojito!
Que lista la tía... :)
ResponderEliminarBesos y salud
Más que lista, que lo será cuando es la reina de las tablas, le cuadra mejor otro calificativo.
EliminarMuy bueno
ResponderEliminarBesos
Gracias Chaly
EliminarUna buenísima comparación ajedrez y vida. Me encantan estos símiles.
ResponderEliminarBss
Los peones, aunque seamos peones sabemos lo que decimos, jajajaja
EliminarQué buena comparación, aunque ya sabes que a mí no me parece tal bicoca ...
ResponderEliminarTodas las fichas son importantes.
Un beso muy fuerte, Tracy.
Que pases buen fin de semana.
Todos somos importantes efectivamente, pero hay quienes se lo creen y ni si quiera tienen el respaldo de todos los peones.
EliminarBuen finde querida Rosa.
Una buena metáfora del tablero de ajedrez y la misma vida.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Carmen, a veces a los peones se les enciende la bombillita, jejejeje.
EliminarLa añeja fascinación por el ajedrez contada como una moderna intriga de palacio... Gracias por participar!
ResponderEliminarEl ajedrez se presta a todo y con buenos resultados.
EliminarMe encanta jugar al ajedrez. ¡Espero con emoción la próxima partida! Y también, tú próximo relato ;)
ResponderEliminarUn besazo, Tracy
Me alegro que te guste el ajedrez y también que te gusten mi relatos y ponerlos a la altura del ajedrez.
EliminarUn beso
Cabe el mismo comentario que en lo de Demiurgo. El ajedrez es un juego tan humano que relata todas las pasiones d ela vida: política, amor, deseo cobardía, etc.
ResponderEliminarY muy bien contado.
Besos
Es verdad... él mismo es la pasión.
EliminarMuchas gracias Oso amoroso.
La reina (o dama) hasta el siglo XV no tuvo el poder de movimientos actual.Antes estaba mucho más restringida en el tablero!
ResponderEliminarMuack
Antes todas las mujeres estábamos más restringidas ¿o no?
EliminarEs q soy aficionada al ajedrez...
ResponderEliminar; )
¿sólo aficionada o maestra?
EliminarMe gusta el ajedrez, de niña jugaba en casa aunque siempre perdía jajaja.
ResponderEliminarUn beso grande.
¡Hola! Me gusta la metáfora del juego de ajedrez con la vida. Muyu bueno te ha quedado.
ResponderEliminar¡Un abrazo!