JUEVEANDO CON LA INSPIRACIÓN

 

Nos conduce Mag, quien nos propone lo siguiente:

1.- Buscar una palabra que empiece por cada una de las consonantes de la palabra "inspiración", Cinco porque la "n" está repetida.

2.- Con cada una de esas palabras hemos de construir una frase.

3.- Con esas cinco frases hemos de construir el relato en cualquier formato.

4.- Las normas a seguir: Sólo se pueden modificar los artículos y los tiempos verbales o añadir pronombres relativos. El orden de las frases es indiferente.

5.- La imagen del relato queda a nuestro criterio.

6.- Los relatos los podréis leer en EL BLOG DE MAG

INSPIRACIÓN

Nadie: "Nadie en el pueblo comprendió bien su trabajo"

      Sabían: "Sabían que no necesitaba el dinero para vivir

Por: "¿Por qué se dedicaría en cuerpo y alma a él?"

Respuesta: "(La) respuesta estaba en su mente"

Cosía: "Cosía porque así se evadía de sus pensamientos"

"Nadie en el pueblo comprendió bien su trabajo"  y se preguntaba "¿Por qué se dedicaría en cuerpo y alma a él?", "sabían que no necesitaba el dinero para vivir" y sin embargo a diario en cualquier época del año la veían encorvada sobre la prenda que tenía entre manos: En invierno   se sentaba tras los cristales de una ventana baja que daba al exterior y cuando empezaba el verano, se trasladaba al patio dejando la puerta de la calle entreabierta como única relación con la vida que existía fuera. 

No se le conocía ninguna otra actividad, ni ninguna relación que no fueran las que mantenía con su dedal, su aguja y sus tijeras.

Cuando le preguntaban, ella siempre decía lo mismo que "cosía porque así se evadía de sus pensamientos"

Su forma de actuar se hizo aún más incomprensible a raíz de dejar de coser para la calle y bordar para ella misma en una gran tela de arpillera con punto de cruz,  "(la) respuesta estaba en su mente" y no era otra que realizar un tapiz que la envolviera en su última morada.

Los vecinos del pueblo estaban intrigadísimos por saber lo que esas letras de colores y puntadas perfectas encerraban.

 Cuando le preguntaban, ella contestaba:

- Antes cosía para vosotros intentando evadir mis pensamientos, ahora cuando realmente he averiguado lo verdaderamente importante que es mi vida interior, coso para mí, escribiendo con hilo y aguja todo lo feliz que he sido en estos años, con mis sueños, mis deseos y el amor que he sentido. Todo eso quiero que me acompañe rodeando mi cuerpo en mi último viaje.

Llegado el día, cumplieron su deseo y por respeto a ella nadie leyó ni una palabra de las que el sudario tenía escritas.

Su amor pervivió, en silencio, con ella tras su muerte.