PRIMER DÍA DE FERIA

Ayer a las doce en punto de la noche, ante una multitud enardecida se encendió el alumbrado de la Feria y empezaron los Fuegos artificiales.

La Feria quedaba inaugurada. Y allí estaba yo. 

Creo que es una reminiscencia infantil, porque todos los años se repite la misma costumbre en la que niños, jóvenes y viejos, nos damos cita allí, sea cual sea el tiempo que haga, anoche hacía un frío que pelaba. Pero allí estábamos para comenzar el sábado, esperando que llegue la mañana para vestirse de gitana y empezar la jarana.

Me vine para casa y me puse a localizar las Casetas que me interesaban

Y llegó la hora del medio día, la mejor para aparecer por el Real.

 Fue un día de Feria muy bueno, no hacía ni frío, ni calor y las nubes tapaban al sol para que no calentara demasiado, para colmo de suerte mi hija había venido a pasar el finde conmigo

Comimos en la Caseta del valle de los Pedroches, encontramos mesa enseguida y en recuerdo de su padre, acompañamos al Rebujito con un buen jamón de su tierra y unos pinchos de cerdo ibérico

y para inmortalizar el momento, se dedicó a pintarme, siempre va acompañada de los trastos de matar, 

Bailamos en todas las casetas que salieron a nuestro paso, como si no hubiera un mañana, y cuando vimos que la feria se cubrió de un techo negro, corrimos a coger un taxi y aunque la predicciones del tiempo, nunca se cumplen, esta vez habían dado agua a las seis de la tarde y justo eran las seis en el momento que entrábamos en el taxi y empezaron a caer gotas de agua como mi puño.

                                                     (Cumple+13)