Nos conduce Inma con una serie de fotos, entre la que tendremos que elegir una, sobre la que escribir y que podréis leer en SU BLOG
Mi foto elegida es esta:
Que eran otros tiempos, te percatas sólo con ver las magníficas fotografías que nos ha mandado Inma no sólo por el blanco y negro, sino porque se adivina el sepia que tiene el alma de las personas retratadas. No pasa igual con este niño que juega a las canicas, está tan comprometido en ganar que saca la lengua como valedora para tener una puntería exacta es lo único que realmente le interesa, calzando esas alpargatas de la época, ajeno a la miseria que rodeaba a su país en aquel tiempo.
Veo en esta fotografía, a Juanito ese primer niño que me gustó, hermano de mi amiga Leo, en aquellos tiempos en los que las primeras pandillas se formaban al recuelo de hermanos, primos, vecinos y gente de familias más cercanas.
"Eran otros tiempos"
Vuelvo a remirar la fotografía y a recordar..., él sabía que yo no le quitaba el ojo de encima y ponía todo su empeño en quedar como campeón ante mi vista, lo que no sabía es que a mí me daba igual el juego de las canicas, a mí el que me gustaba era el de "policías y ladrones" y que él me encontrara e hiciera como que no me había visto para que no perdiera.
¡Eso significaba mucho para mí!
Pienso que no he cambiado tanto desde entonces, porque me siguen importando cero coma cero, los éxitos y los campeones, en cambio me siguen entusiasmando aquellas personas que me encuentro en mi caminar diario y son capaces de salvarme la vida, si llegara el caso.
Hola Tracy, soy una enamorada del retrato en blanco y negro, a veces consigue reflejar el alma, lo más profundo del ser. Evidentemente, no es el caso de este crío, que mira hacia abajo, porque está absorto en el juego.
ResponderEliminarFeliz jueves. Bstes.
El blanco y negro es más artístico que el color, porque juega con las luces y las sombras. Pero aquellos blancos y negros...
EliminarUn besazo
Si que eran otros tiempos, y llevábamos una bolsita de tela con las canicas dentro a todos lados, porque en cualquier momento se podía dar una partida.
ResponderEliminarEráis chicos precavidos.
EliminarY yo tambien la he remirado, una foto como esa tenía mi suegra, mi cuñado era "campeón" de gua de su pueblo.
ResponderEliminarPerdona mi ignorancia ¿que es el juego de la gua?
EliminarSe jugaba a las bolas (canicas) y también a las chapas (tapones de botella), ¡¡que tiempos!!, pese a esos bonitos recuerdos, ningún tiempo pasado fue mejor.
ResponderEliminarSaludos
Cada tiempo tiene sus ventajas e inconvenientes. Ni mejores, ni peores son distintos.
EliminarEsas últimas son las que cuentan.
ResponderEliminarUn abrazo!
En esas estamos.
EliminarQué hermoso relato te inspiró la fotografía llevándote a tu primer amor de la infancia, yo siempre lo llevo a Juan Carlos y su olor a jabón Palmolive, un abrazote Tracy!
ResponderEliminarJajajajaj ¿no sería el emérito, no?, mi Juanito también era más limpio que un jaspe, tan repeinado...
Eliminarjajaja, no creo que llegara hasta acá, aunque era rubio y de ojos azules!
EliminarBonitos recuerdos los que te ha traído la fotografía, mirándola nos damos cuenta cuánto han cambiado la forma de jugar de los más peques de hoy en dia.
ResponderEliminarUn abrazo.
No hay color entre unos y otros.
EliminarPublicação muito interessante. Foto a fazer lembrar os meus tempos de criança.
ResponderEliminar.
Cumprimentos poéticos
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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El chico de la fotografía irradia carácter por lo expresivo que es! Y el gesto tan tierno del Juanito de tu relato, es muestra de un "amor verdadero", inocente e inmaculado, como los que ya solo existen en aquellas épocas! Sin duda! Un abrazo!
EliminarRyk me alegro mucho que a ti también te recordara tu niñez, no sería muy diferente a la nuestra.
EliminarMarifelita, entonces todo era inocente, no se podía una imaginar que el amor no fuera de verdad.
EliminarUn abrazo fuerte.
Contundente aseveración final para un magnífico texto, Tracy. No podría estar más de acuerdo con ella.
ResponderEliminarGracias.
Una descripción perfecta.
EliminarPues muchas gracias.
EliminarQué buen relato... Y ya no solo en forma, sino, sobre todo y también, en fondo… Ese (tras)fondo que, una vez más, deja entrever tu bonita esencia en aras de la verdad de las emociones: esas que te hacen ganar en el día a día; ese caminar que te muestra lo que de verdad importa más allá de frívolos éxitos que distan mucho de lo que suma y aporta en la vida.
ResponderEliminarTambién has dirigido la belleza de la escena, hacia una bonita y tierna historia con aquel niño y sus pequeñas trampas como muestra de su cariño… ¡Qué bonito!...
En definitiva… Un placer tu aportación, mi querida Tracy.
Abrazos enormes, y muy feliz día 💙
Gin agradezco mucho tus palabras, siempre son un aliciente para mí. Esta vez sonó la flauta por casualidad al ver a ese niño tan limpio y tan peinado me acordé de mi Juanito, no lo pude remediar.
EliminarÉramos seres tan inocentes, tan sin maldad, que inspirábamos ternura.
Un beso muy grande.
En esos tiempos los niños disfrutaban de la realidad.
ResponderEliminarAhora viven entre pantallas.
Pues sí, la vida...
EliminarMe encantó tu nítida descripción de tan magnífica fotografía... que me provoca nostalgia e identificación.
ResponderEliminarAbrazo hasta vos.
También a mí mientras la escribía me produjo nostalgia, más por la edad que teníamos, que por los hechos.
EliminarQue tiempos! Creo que todos debemos tener recuerdos en blanco y negro o sepia, solo hace falta desenpolvarlos para volverlos a revivir.
ResponderEliminarMolts petons
Fueron muy bonitos y están a la base de nuestra historia personal, pero yo no los cambio por los actuales. ¿que quieres que te diga?
EliminarUna imagen que te ha trasladado a tu infancia y que me ha llevado a escapar una sonrisa de complicidad ante la ternura de ese primer amor. Gracias por sumarte, besos.
ResponderEliminarGracias a ti por dirigirnos y buscarnos esos temas que nos hacen revivir aquellos tiempos lejanos.
EliminarUn besito.
Esa estrategia de recordar a través de la foto aquel primer niño que atrapó tu corazón, me ha enternecido. Muchas gracias por compartir tus sensaciones. Un abrazo Tracy
ResponderEliminarTambién los he compartido conmigo misma, estaban por ahí metidos y han salido a la luz. ¡a su casa vienen!
EliminarIdealista naciste e idealista te morirás.
ResponderEliminarChiva, pie, tute y gua.
Jajaj me ha sonado eso a "polvo eres y en polvo te convertirás"
EliminarUna imagen que me retrotrae a épocas vividas en donde nos arreglábamos con simples juegos y juguetes, que en mi caso los hacía mi padre.
ResponderEliminarBesos Tracy
y éramos más felices que ahora con tanta pantallita o por lo menos se desarrollaba más la imaginación y la creatividad.
EliminarTodo lo que puede evocar una foto, magnífico relato autobiográfico repleto de inocencia y ternura. Abrazos
ResponderEliminarY puede dar más de sí, pero las Leyes de Tésalo , lo impiden
EliminarSe jugaba en la calle. La calle era nuestra pantalla donde la vida transcurría entre pedradas y primeros amores.
ResponderEliminarAsí es y también transcurrían para nuestras rodillas echadas abajo, antes que se cayera la costra anterior.
EliminarTu relato me ha conmovido profundamente. Esto de acuerdo cobtigo a mi también me emociona esectipo de personas, que las hay y no hacen ruido, en contraposición lis campeobes 0,0. Fantástica imagen la de cusbde se "adivina el sepia que tiene el alma de las personas retratadas". Y ese Juniti, tu juanito, un genio y amor de chico.
ResponderEliminarBesotes, Tracy.
Si al final tú y yo nos parecemos mucho, aunque no lo parezca.
EliminarLa verdad es Juanito era un encanto de niño, aún viéndolo con los ojos de ahora mismo.
Un beso enorme.
ohhhh, ese si que es amor del bueno, a saber cuántos corazones se rompieron, dejándote escapar. Un abrazo y gracias por el relato.
ResponderEliminarEl primer enamoramiento siempre es bueno porque tiene el halo de la inocencia con la que te crees una mujer o un hombre en el caso de ellos.
EliminarUn abrazo y gracias a ti por leerme y comentarme.
La primera vez que me enamoré profundamente tenía 6 años y ella pasado el tiempo, también se acuerda de mi...aquel amor que tuve fué limpio e inocente. Recuerdo muchas escenas. Pasado el tiempo, ella sigue tan guapa como siempre.
ResponderEliminarUn saludo
Uy, uy ,uy... que me parece que aún la recuerdas con amor del bueno.
EliminarGracias por tu sinceridad al hablarnos de tus seis años y de ese amor inocente y puro.
Es hermoso ver como una foto nos produce tantos recuerdos buenos...Las emociones siempre perduran en el alma y es la mejor prueba de que hemos vivido y vivimos,porque siempre las renovamos, Tracy...Una preciosura, que emociona, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo inmenso por tus buenas letras, compañera y amiga.
Gracias por tus palabras siempre llenas de cariño, y que siempre disparan mis emociones cuando te leo,
EliminarTú si que eres una preciosura.
el alma de Séneca sigue regando las tierras béticas, has abierto la mente a recuerdos que una fgotografía te trae, el poso que queda en mi de tu entrada es que desde siempre has eliminado la paja para elegir lo importante. Un abrazo
ResponderEliminarPues no es porque sea yo el origen de ese “poso" pero me parece que tú tambié sabes separar el grano de la paja.
EliminarEl juego inocente de las canicas. Me está gustando muchísimo leeros. Es sorprendente la variedad de puntos de vista, de los demás al contemplar la imagen. Eso es bonito ,¿ verdad Tracy.? Un abrazo .
ResponderEliminarEs muy interesante ver cómo se van desarrollando los distintos puntos de vista, a través de los diferenhtes relatos, resulta divertido.
EliminarCuánto puede evocar una imagen, cuantos recuerdos y primeros amores.
ResponderEliminarUna bella tú entrada