Doro nos propone hacernos pasar por seres con vida pero que no sean personas, aunque admite rocas, montañas, mar, etc, cualquier elemento natural que nos cuente sus impresiones.
Podéis ver los elementos que hemos elegido aquí
Yo elegí una Playa que me está doliendo en el alma.
Voy a dejar que ella se exprese:
Creo que lo mejor será presentarme, para que me conozcáis:
Soy la Playa del Tarajal, no soy un ser vivo pero actualmente estoy más viva que muchos seres que lo son.
Nunca se han preocupado por mí. Nunca salí en la prensa escrita y ni si quiera salí en la tele, lo más que he salido es en las fotos de lxs niñxs que hace ya mucho tiempo venían con sus padres a jugar en mi orilla y eso que soy consciente que mis arenas no eran muy finas, lo que hizo que perdiera importancia frente a la playa del Chorrillo, que estaba al lado del Foso y muy cercana al centro urbano.
Estaba contenta porque siempre fui un lugar de recreo, donde las familias tanto españolas como marroquíes venían a disfrutar de mis aguas, gozando de una convivencia admirable, no olvidéis la ubicación que tengo, una parte de la playa está en territorio marroquí, y otra en territorio español lindante con Benzú una pedanía de Ceuta, de hecho los espigones que estos días aparecen repletos de marroquíes y subsaharianos , están justo ahí .
Antes, el carácter de sus gentes era abierto y muy social, el hecho de que los peninsulares que vivían en Ceuta no tuvieran familia allí, hacía que las relaciones sociales adquirieran gran importancia.
En mis arenas, musulmanes y cristianos se relacionaban con personas de otras religiones, todos se respetaban y los más pequeños participaban en todas las fiestas religiosas sean del credo de su familia o no, esto era una extensión de lo que pasaba en la ciudad e influía en los niños y jóvenes de aquellos tiempos, que lo veían como algo normal.
Mi época dorada fue degenerando en otra época gris porque al estar cerca de la frontera y me fui devaluando poco a poco.
Últimamente todo ha ido a peor, las presiones migratorias han ido cambiando mi fisonomía: en se crea 1971 la valla de Ceuta y se inaugura en 1996. No queda ahí la cosa , sino que en octubre del 2005 se colocan las concertinas, que más tarde ante las críticas de las organizaciones de derechos humanos, se retiran en el 2007 más tarde se vuelven a instalar, me falla la memoria porque esto es objeto para conseguir votos en las diferentes elecciones.
Hoy día estoy viviendo mis peores momentos al ver llegar a mis orillas gentes que huyendo del hambre de sus lugares de origen, vienen extenuados por querer alcanzar mi costa a nado o en cayucos abarrotados de personas que naufragan en aguas del Estrecho y si no lo hacen, sus ocupantes llegan deshidratados y en muy malas condiciones o en el peor de los casos pierden la vida.
No sabéis lo mal que lo paso viendo a esas criaturas que las devuelve el mar sin vida o en unas circunstancias extremas, esos niños, esos muchachos, esas mujeres...
¡Que distinto es todo, comparándolo con aquellos otros tiempos! Ahora mis arenas están invadidas por jeeps y por soldados que dicen que su misión son las labores humanitarias , pero que a mí me recuerdan otros tiempos muy lejanos de los que he oído hablar.
Deseo que todo acabe pronto y que ahora que el mundo me ha conocido y me ha ubicado donde me encuentro, me visiten y pueda volver a oír las voces y los juegos de los niños en mi playa, pueda contemplar a los enamorados amándose en mis aguas y ser confidente de aquellos que se sientan en mi orilla para hacerme partícipe de sus cuitas y acompañarlos a disfrutar de nuestra Luna Norteafricana, que tiene una magia especial para conseguir que los sueños se hagan realidad.