a celebrar el alta de mi nieto yendo a mediodía a comer unas Milanesas
Me puse contenta porque no dijeron de ir a un Japo, lo que yo no sabía es que el tamaño de las milanesas era: XXL.
Mejor, así no tenemos que pensar en la cena.
Luego fuimos a la Fundación Tàpies
a ver la exposición de Chiharu Shiota, artista japonesa, cuyas obras son perecederas, solamente se conocen por las fotografías que quedan de ellas una vez expuestas.
Estaba muy interesada en ver algo de esta artista en vivo y en directo y considero un regalito de la vida, que haya podido visitarla antes de irme, porque es una pasada
"Cada quien, un universo", invita a que te sumerjas en su obra, sin personajes, pero sí, objetos atrapados en una madeja de hilos que al mirarlos enlazan situaciones que están en tu memoria y te conectan con el tiempo presente.
Sólo ocupa dos salas y su bajada ya es un anticipo de lo que vas a encontrar en ellas
continúas bajo el laberinto que te envuelve...
Usa como material el hilo trenzado formando telas de araña imposibles de desenredar con ello quiere explicar que todos somos uno con el Universo.
En la primera sala se encuentran obras recuperables de vidrio, piedras, cuero...
Contigua está vitrina. En un encuadre de la sala aparece una enorme bota de vino que sale de unas botas de bronce.
Y ya como remate ésta que es una auténtica gozada la mires desde el ángulo que la mires
Es onírica, parece que entras en una especie de cueva-teatro llena de sillas vacías... o no...
y a través del entramado de hilos, se aprecian unas sombras borrosas que son los visitantes, dando un aspecto misterioso a la obra.
En un lateral una silla aislada que forma parte importante de la red de hilos que juegan a tapizar la pared.
Ampliar la imagen tanto como podáis y veréis la tela de araña que tiene cada una de las sillas, para formar el conjunto total. Un
Una maravilla que no te cansas de contemplar.
Un buen evento para celebrar este año que está dedicado a Tàpies.