la que daba por finalizado el mes de agosto para comenzar el mes de septiembre.
Castillo Sohail de Fuengirola (Fuenlli para los amigos)
Castillo Sohail de Fuengirola (Fuenlli para los amigos)
No me resisto a decir la frase tan manida de "un marco incomparable". La he dicho.
Aquí nos brindó Miguel Poveda tres horas insuperables de concierto
Aquí nos brindó Miguel Poveda tres horas insuperables de concierto
Se le notaba agustito en un patio de armas lleno de público que lo aplaudía a rabiar y sabía guardar silencio cuando el cante "jondo" lo requería y marcar el compás con sus "ole".
Dividió el concierto en tres partes, la primera la dedicó a cantar a poetas imprescindibles: Miguel Hernández, abrió con su "Canto a la Libertad", para luego seguir con Lorca y Ángel González.
Dividió el concierto en tres partes, la primera la dedicó a cantar a poetas imprescindibles: Miguel Hernández, abrió con su "Canto a la Libertad", para luego seguir con Lorca y Ángel González.
La segunda parte estuvo dedicada al flamenco más puro, que fue tocado con la magia del silencio de la noche y Poveda se sintió como si estuviéramos "los cabales".
Cantó por distintos palos, sentado, de pie y sin micrófono...
¡Qué arte!
Hizo pasearse al duende por las almenas del Castillo y bajar al escenario para fundirse con los movimientos de la bailaora malagueña, raza y poderío, a la que acompañó el cantaor con su característico estilo al bailar, que puso al público en pié.
Cantó por distintos palos, sentado, de pie y sin micrófono...
¡Qué arte!
Hizo pasearse al duende por las almenas del Castillo y bajar al escenario para fundirse con los movimientos de la bailaora malagueña, raza y poderío, a la que acompañó el cantaor con su característico estilo al bailar, que puso al público en pié.
Dejó la Copla para el final y le agradeció que le hubiera dado a conocer como cantaor flamenco que es lo suyo, cosa que quiso dejar bien clara.
Tras un bis de cuarenta minutos se marchó del escenario arropado por su gente.
Abajo, su otra gente, seguíamos con la sensibilidad a flor de piel.
(Me acordé mucho de ti, Zarza)
¡Qué ganas tengo de ir a verle!
ResponderEliminarHa estado por aquí, pero las circunstancias no me lo han permitido.
Ya volverá.
:)
ResponderEliminarSeguro que fue una pasada.
Besos.
Pues si, el marco era incomparable para un artistas mas incomparable todavía.
ResponderEliminarUn abrazo.
seguro que estuvo bien
ResponderEliminarUN marco incomparable (ejem, ejem, vaya tos)
ResponderEliminarOle, ole y ole!!!
ResponderEliminarSi es que lo tiene todo... salero, duende, y la gracia y el embrujo de hacerme vibrar y encandilarme toda entera.
Guapo él.
Guapa tú.
Eso es arte al estado puro.
:)
Besos, linda.
Miguel Poveda me gusta mucho, es uno de los mejores . No sustituye a nadie, es diferente y único. Un poquito de envidia si que me das.
ResponderEliminarUn abrazo
Una maravilla y que elegante!!
ResponderEliminarSe nota que disfrutaste mucho.
Besos!!
Una noche inolvidable para rememorar al calor del hogar en las estaciones que llegan.
ResponderEliminarMagia en estado puro.
Besos.
¡Quién daría lo que fuera por estar allá!
ResponderEliminarSeguro que lo pasaste genial(:
Saludos
http://lasfotografiasdesaioa.blogspot.com.es/
¡¡Miguel Poveda!! Artistazo como la copa de un pino, y uno de los mejores conciertos que he visto en mi vida. Pude disfrutarlo por primera vez este mes de agosto y será sin duda uno de los grandes recuerdos de este verano 2013. ¡¡Grande Miguel!!
ResponderEliminarQué suerte!
ResponderEliminarEs un gran artista.
Bsssss
Fuenlli, jajja me ha gustado. Una noche directa al corazón.
ResponderEliminarY tú, en primerísima fila!! No podía ser de otra forma! Ole!
ResponderEliminarNo dudo de que lugar del concierto sea inmejorable, pero yo a Miguel Poveda lo escucho bajo las estrellas y al borde del mar y lo disfruto también en cualquier lugar que se preste para su arte.
ResponderEliminarAdmiro de el su entrega, su arrolladora personalidad y su enciclopédico conocimiento de palos y cantaores que han significado algo en el difícil arte del flamenco (de Mairena a Valderrama, de Chacón a Farina, de Caracol a Bambino, de Vallejo a Camarón). Sus respeto por la copla, a la que logrado sacar del marasmo y la ramplonería.
Y sin dejar de ser clásico, no le ha importado indagar por otros derroteros, prestando su alma a los poetas que tienen algo que decir, a otras músicas alejadas pero proclives a la sensibilidad.
Perdón por la longitud de mi comentario, pero este cantaor me ha devuelto la ilusión por un cante flamenco que poco a poco iba olvidadndo.
Envidio tu suerte por haber podido disfrutar de esa noche.
Un abrazo.
son esos momentos que suman.
ResponderEliminartu de estos tienes mogollon.
Qué bonito, debió de estar espléndido el concierto, Un abrazo.
ResponderEliminarMucho arte, besos.
ResponderEliminarCiertamente, es un marco incomparable, claro que sí; se ve que fue una noche mágica, me alegra mucho.
ResponderEliminarBesos.
Un reportaje de altura, en donde abunda belleza ¡Claro estás tú!
ResponderEliminarBesos.
Desde luego un agradable concierto en un "marco incomparable"...sí...ciertísimo!
ResponderEliminarBesosss!!
Tuvo que ser una una noche mágica sin duda.
ResponderEliminarBesos con alivio del levante.
Lo que has gozado se trasmite en tus imagenes y letras.
ResponderEliminarMe alegro de tus buenos momentos!!!!
Cariños
Parece que fue un buen concierto.
ResponderEliminarUn bis de 40 minutos? madre mía! Desde luego no puedes negar que estaba agustito.
Seguro que su "otra gente", lo disfrutó a rabiar.
tú incluida.
;-)
Besos mediterráneos.
Que bonito tuvo que ser, se me pone el bello de punta
ResponderEliminarBuen final de veraneo
Besos