es la convocatoria que nos hace Juan Carlos, así es que si queréis ampliar vuestro círculo de personas conocidas, pinchad aquí
PERSONAS
Esta imagen de felicidad, sencillez y ligereza, me ha llevado a escribir sobre las personas que por su especial idiosincrasia nos hacen más agradable la vida.
Estoy segura que de esas, hay muchas, pero me voy a centrar en las gentes de Conil que parecen estar hechos de una manera especial o será que el aire del Levante le arrastra los enfados, el desagrado y todo lo que de negativo tiene el ser humano, por supuesto que entre ellos habrá de todo, pero nunca me los encontré en las veces que estuve allí.
Esta imagen de felicidad, sencillez y ligereza, me ha llevado a escribir sobre las personas que por su especial idiosincrasia nos hacen más agradable la vida.
Estoy segura que de esas, hay muchas, pero me voy a centrar en las gentes de Conil que parecen estar hechos de una manera especial o será que el aire del Levante le arrastra los enfados, el desagrado y todo lo que de negativo tiene el ser humano, por supuesto que entre ellos habrá de todo, pero nunca me los encontré en las veces que estuve allí.
Por la mañana cuando iba a la tiendecilla de la esquina a comprar, una mujer jovial me recibía con la mejor de sus sonrisas y a la vez que me daba los buenos días te preguntaba lo que necesitabas y al contestarle:
- No tengo prisa, gracias, ahora cuando llegue mi turno...
- ¿Y si no tengo lo que viene buscando? ¿para que va a perder horas de playa? Conozco a mis clientes y si se lo digo es porque puedo decírselo, créame.
Naturalmente lo que iba a buscar, lo tenía. La tienda se llamaba "Un poco de todo"
- No tengo prisa, gracias, ahora cuando llegue mi turno...
- ¿Y si no tengo lo que viene buscando? ¿para que va a perder horas de playa? Conozco a mis clientes y si se lo digo es porque puedo decírselo, créame.
Naturalmente lo que iba a buscar, lo tenía. La tienda se llamaba "Un poco de todo"
Las veces que estuve allí no paraba de atender a unos y otros sin perder la amabilidad, ni la calma.
¡Una buena manera de empezar el día!
Al transitar por la zona no peatonal, los que conocen el lugar saben de las cuestas y de las aceras sumamente estrechas, jamás he oído tocar el claxon porque los peatones fueran por la calzada, se limitaban a ir detrás suya, como si el coche fuera otro peatón más, hasta que al oír el motor, le dejaban paso.
¡Increíble!
Ya por la noche, sentados en la terraza de un bar en el que las mesas invadían la puerta de entrada de una casa, intentamos levantarnos para darle paso a un chico que venía con un cochecito de bebé.
- No se molesten, pliego la sillita y la paso por encima, porque se les va a enfriar el pescado si empiezan a moverse.
¡Buena onda de principio a fin!
Personas que nos hacen la vida más llevadera.
Al transitar por la zona no peatonal, los que conocen el lugar saben de las cuestas y de las aceras sumamente estrechas, jamás he oído tocar el claxon porque los peatones fueran por la calzada, se limitaban a ir detrás suya, como si el coche fuera otro peatón más, hasta que al oír el motor, le dejaban paso.
¡Increíble!
Ya por la noche, sentados en la terraza de un bar en el que las mesas invadían la puerta de entrada de una casa, intentamos levantarnos para darle paso a un chico que venía con un cochecito de bebé.
- No se molesten, pliego la sillita y la paso por encima, porque se les va a enfriar el pescado si empiezan a moverse.
¡Buena onda de principio a fin!
Personas que nos hacen la vida más llevadera.
Vamos, igual que los de las grandes ciudades...
ResponderEliminarBesos.
Las grandes ciudades producen monstruos, como los sueños de la razón.
EliminarGracias a Diós, que existen estas personas.
ResponderEliminarperque nos ponen mas faciles las cosas y nos ayudan a se mas felices.
Saludos muy cariñosos, Tracy
Abundan más que las otras, lo que ocurre es que pasan más desapercibidas.
EliminarSabía que de todas las imágenes esta es la que tu escogerías, y me encanta, te ha servido para servirnos en bandeja la alegría, la bondad, la cara agradable de la vida, hay muchas personas como estas y solo hablamos de las otras. Hoy ya estoy contenta. Saltos y brincos
ResponderEliminarUna de dos o eres brujita o me conoces muy bien, ya me contarás cual de las dos cosas es la verdadera. Besitos.
EliminarEs la que hubiera elegido yo, jeje. Cosas de bruja.
EliminarEs bueno saber que no sólo en Conil, en cualquier lado del mundo, hay buena gente o buenas personas.
ResponderEliminarSi todos fueramos así, que pedazo de mundo sería este¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Besos
Está en nuestra mano hacer todo lo posible para mejorar la parcela del mundo más próxima a nosotros y que vaya irradiándose la buena onda.
EliminarUn beso.
Entran ganas de irse al Conil.
ResponderEliminarUn beso.
Pues sí, no lo dudes un momento.
EliminarCuando era pequeña, creía que Conil estaba en el extranjero... Válgame, qué gente más estupenda.
ResponderEliminarJajajajaja ¿Y eso por qué? ¿te sonaba el nombre extraño?, hoy día casi lo es por la cantidad de guiris que hay, pero casi son conileños en su forma de ser..
EliminarEmpiezo a luchar contra la "civilización".
ResponderEliminarUn abrazo.
¡¡¡¡Biennnnnnn!!!!!, vamos ganando adeptos.
EliminarConil es un sitio encantador, lo mismo que su gente
ResponderEliminarCelebro que rubriques mi afirmación para que los incrédulos me crean.
EliminarAsí da gusto!
ResponderEliminarAquí casi todo el mundo lleva cara de perro cabreao...
Una semanita en Conil necesitaría yo...
Bssss
Más que tú, la semanita en Conil la necesitarían los "perros cabreaos", jajajajaja.
EliminarHay gente maravillosa por el mundo, gente alegre, que nos cautiva por su sonrisa, su amabilidad y su servicio. No conozco Conil, pero al hablarnos tan divinamente de este lugar, quién sabe si alguún día voy por allí y me pueda encontrar con tu sonrisa.
ResponderEliminarUn beso de ternura
Sor.Cecilia
Si la visitara estoy segura que le gustaría, se encontraría en su ambiente con gente sin hábito pero buena de verdad.
EliminarUn abrazo.
Sin duda cuesta bien poco solo un poco de voluntad y todos seríamos más felices. Donde vivo es un pueblo del norte de la isla de Tenerife y cuando voy a la ciudad noto, notablemente, el cambio de comportamiento entre un lugar y otro, debe ser que la gente confunde civilización con mala educación y mal rollo.
ResponderEliminarBesos de gofio.
La amabilidad cuesta poco practicarla, pienso que son las prisas y el estrés lo que hace distinta a la gente de la ciudad a la +de los pueblos.
EliminarA ese paraíso me quiero ir a vivir.
ResponderEliminarQue lindo que la cordialidad, la bondad este primero.
;)
He contado mi experiencia, aunque no dudoque haya gente de todo tipo que serán la excepción que confirme la regla-
EliminarTropezar con el mundo pseudorural, el de la gente sencilla es algo que convendría que todos supiéramos hacer a menudo. Lo hice durante muchos años, cada verano, hasta que cumplí los 16. Aún lo añoro. Tracy. Tu relato me ha hecho volar hasta allí. Gracias.
ResponderEliminarMe alegro de haberte hecho revivir etapas felices de tu vida.
EliminarUn abrazo
Sin duda alguna, que bien que aún nos encontramos con personas que irradian esplendor de energías sanas, y que ayudan a motivarnos a ver la vida desde otra perspectiva. Genial aporte.
ResponderEliminarSaludos
Ese es su mayor atractivo que te hacen ver que otra sociedad es posible y no es pura utopía.
EliminarLa gente así, me encanta, buena gente...alegre, sencilla... todo es más fácil así...
ResponderEliminarUn saludo y ¡olé! para ellos y un beso fuerte para ti (olé también).
¿Y a quién no?, lo agradable nos gusta a todos, incluso a los que no lo son.
EliminarLa buena gente se tropieza con buena gente....
ResponderEliminarBesos
¿Es por eso que me he tropezado contigo? Gracias por propiciar nuestro encuentro.
EliminarEse comportamiento tolerante lo hacen los siglos de civilización que tienen y su modo de entender la vida :)
ResponderEliminarBesos y salud
Sí es su modo de entender la vida, el mar, el Levante, las civilizaciones que han pasado por allí, una mezcla de todo.
EliminarEn las ciudades del interior se vive sin prisa y si es turística más, los estresados y apurados son los que en verano llegan a ella. Vivo en una ciudad a la que la llaman "ciudad feliz", si quieres conocerla en el margen derecho de mi blog está.
ResponderEliminarBesoss hoy desde
http://norma2-siempreesprimavera-norma2.blogspot.com.ar/2014/04/los-pequenos-robots-que-invadiran-el.html
He ido a conocer tu ciudad, en e llado derecho de tu blog, es preciosa y ese apelativo de "ciudad feliz" aún la hace más atrayente.
EliminarBuen ánimo, se adivina muy buena salud. Las personas con ese tipo de actitud son personas sanas.
ResponderEliminarSaludos Tracy.
Bueno no lo sé... esa afirmación implica ir demasiado lejos, aunque la salud mental se ve que la tienen perfecta.
EliminarMadre mía...si todo el mundo fuera así..
ResponderEliminar...otro gallo cantaría!
Eso es justo lo que pensamos todos.
EliminarSí, en Conil sólo hay gente maravillosa. No es como en Zaragoza, por ejemplo, que hay de todo.
ResponderEliminarEn Conil también hay de todo, como en todos sitios, lo único que tuve la oportunidad de conocer a gente buena igual que en Zaragoza te conocí a ti que eres super divertido y contribuyes a hacerla ida más agradable.
EliminarUn cuento de hadas. :-)
ResponderEliminarA veces los cuentos cobran realidad por algunas personas que los hacen posibles.
EliminarMe apunto a ir yaaa!! No es un sueño??
ResponderEliminarBesos!!
Prueba a ir y luego me cuentas.
EliminarHola, Tracy.
ResponderEliminarConozco a alguna de esas personas que te hacen seguir por la vida con alegría.
Unos besos.
Te felicito a ti y a ellas.
EliminarUn abrazo.
Reconozco a esa buena de Conil, he ido mucho por allí y sé de lo que hablas. Por cierto mi exposición de faros se inaugura en Conil el día 8 de mayo.
ResponderEliminarBesos
Ya me contarás como ha ido todo, te deseo lo mejor.
EliminarQué pena que no haya sido mientras estaba allí, hubiera asistido encantada.
Un abrazo y suerte.
Pues si, la verdad es que esas personas te hacen la vida más feliz; pero no son muchas, sobre todo en la ciudad cuando todo el mundo va con prisa y no se paran para nada.
ResponderEliminarUn abrazo
No son muchas pero seguro que son más que aquellas otras personas que hacen que la vida no sea tan agradable como debería serlo.
EliminarPor mucha maldad que haya, siempre quedará gente buena.
ResponderEliminarBesos.
Y en mayor número que la que no lo es.
EliminarTracy, te he dejado comentario, no sé si ha entrado. Pero bueno te decía que por mucha maldad que haya en este mundo, siempre quedará gente buena.
ResponderEliminarBesos.
Qué lindos son esos sitios donde la gente tiene un ritmo distinto, pacífico, y lleno de buena energía.
ResponderEliminarMe pasó algo parecido en mis vacaciones, cuando fui a un pueblo donde la gente siempre estaba de buena gana para atender a los clientes, y predispuesta para ayudar a los turistas.
Un beso.
Me alegra que hayas disfrutado con una experiencia similar a la mía. Es genial.
EliminarLo que se dice un relato constructivo Tracy!!
ResponderEliminarTracy, se agradece entre tantas noticias negativas...que nos dejes tu crítica positva y constructiva a las gentes de Conil...Me encanta, amiga. Mi felicitación y mi abrazo. Feliz fin de semana, Tracy.
ResponderEliminarM.Jesús
Igual que se dicen las cosas negativas hay que decir también las cosas positivas, es casi un deber.
EliminarCreo en la buena gente, me gustó tu relato Tracy
ResponderEliminarGracias Lao por tus comentarios, celebro que hayas calificado mi relato de constructivo, haber si aprendemos algo.
EliminarUn beso.
Me alegro que hayas encontrado un lugar así, si conoces alguno más compártelo, no es fácil ver gente amable y contenta, creo que los tiempos que corren no lo favorecen, aunque es verdad que no se puede generalizar y hay personas maravillosas que de vez en cuando nos dan una buena lección.
ResponderEliminarAbrazos.
Ya lo creo que la hay... y por todas partes.
ResponderEliminarBesos, linda.
NO PUBBLICAR sigo la entrada de HUGO esta tan linda la pude leer en el fleedlly bien, a buen tañaño, lo
ResponderEliminarque te digo pasa cuando quiero acceder a tu blog.
Esas personas nos hacen la vida más fácil, y tu al contárnoslo, también.
ResponderEliminarUn beso.
Es una suerte encontrarse con personas así, bien dispuestas y con buena onda. A veces nos damos de narices con cada caracúlico, que la diferencia se agradece. Una sonrisa, buena disposición y trato, hace que todo sea más llevadero.
ResponderEliminarSonrisa para ti Tracy y un beso al vuelo!
Gaby*
Lamentablemente no se prodigan mucvho esa clase de personas tan amables, si están en tu entorno, felicidades.
ResponderEliminarHabrá que ir a Conil, que no lo conozco. Que ambiente tan de personas en toda la extensión de la palabra. Besos.
ResponderEliminarHe disfrutado tu relato costumbrista, reflejo del hacer de un pueblo y sus gentes. es bueno conocer estos detalles que te hacen añorar esos lugares. Muy bonito.
ResponderEliminarQué bello se puede tornar el mundo con lo común, verdad? Yo tuve de esos días en los que el sol brilla y la gente es amable, aunque por Buenos Aires es algo difícil de encontrar, todos llevan tanta prisa... Muy bello el relato!!
ResponderEliminarBesos muchos!
Vamos, que leyendo este homenaje a las gentes de Conil, no me queda mas remedio que ir un dia de estos a disfrutar de su gente y de su mar.
ResponderEliminarBesos
Me gusto mucho tu reflexión. Me recordó un viaje que hice hace años a la isla de El Hierro. Allí (al igual que en las otras islas más pequeñas) la gente sigue viviendo como si fueran todos una gran familia (de echo, en muchos casos es así).
ResponderEliminarEn una ocasión nos quedamos sin agua para beber y, no habiendo ningún sitio cerca para comprarla, tacamos a la puerta de una las pocas casas que había. Allí aún se dejan las puertas abiertas. Nos recibió una señora mayor que no solo nos dio toda el agua que quisimos con una gran sonrisa, sino que además nos invitó a entrar en su casa a tomar café. Huelga decir que mi familia y yo pasamos una tarde muy agradable en compañía de aquella señora que hasta entonces no conocíamos de nada.
Un abrazo.
ibso
Solamente he estado un día en Conil, pero con tiempo más que suficiente para apreciar y percatarme de esa amabilidad que resaltas en tu entrada. Cuando por circunstancias perdemos la fe en las personas, deberíamos recordar que son muchas más las personas amables, generosas, cordiales que las otras, pero "destacan" menos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me gustaría encontrar un lugar así, donde la buena onda sea general. Agradezco si, cuando algunas veces siento que realmente se me trata amablemente... Claro, estas son las cosas que le provocan a una querer seguir yendo a ese lugar.
ResponderEliminarUn beso!