Nos guían Rosana y Patricia, en su blog podéis leer todo lo que decimos sobre las nubes.
htps://somosartesanosdelapalabra.blogspot.com/
Desde pequeña me fascinaron las nubes.
Me entretenía mirando sus formas y buscándoles parecidos con animales u objetos.
Me recuerdo tumbada boca arriba en el césped de la piscina y en la arena de la playa, buscando semejanzas razonables. Aún hoy lo hago.
Esta distracción siempre me ha acompañado a lo largo de la vida.
Pienso que el espectáculo que nos ofrecen las nubes, es el único que existe en la Naturaleza distinto, continuo y gratuito, ya estés en la ciudad o en el campo, en la montaña o en la playa, en un país o en otro, puede ser de día o de noche porque incluso de noche, si se mira con atención al cielo, se pueden percibir los contornos de las nubes en continuo movimiento. Siempre aunque el día esté despejado se escapan algunas hebras blancas como de algodón con las que se hacen notar.
De hecho en tiempos de pandemia, todos los días las fotografiaba y tengo una colección estupenda y lo que es mejor, gracias a esa rutina los días se me hicieron más llevaderos.
La fotografía que traigo hoy es de este verano: estaba tomando un té en el Paseo Marítimo, y al alzar la vista del libro que estaba leyendo, me encontré con este espectáculo que se me representó una mujer nadadora en el aire: piernas en movimiento, brazada hacia atrás y cabeza en punta de flecha, incluso las líneas de movimiento que quedaban tras ella estaban interpretadas por ráfagas pequeñas de nubes. Escribí un relato, allí mismo, que rompí y ahora me hubiera hecho falta tenerlo, en él hablaba de una mujer que estaba sola en la playa y recordando a su amado, cada día, nadaba y nadaba sin descanso y sin cansancio impulsada por el amor que sentía y era tal su velocidad que se despagaba del mar e iba por el aire oteando para ver si lo encontraba en su playa que estaba un poco más arriba, y cuando lo hacía , se fundían en un abrazo memorable.
Como veréis el relato no era nada del otro mundo y la foto tan poco era para enmarcarla, pero para mí, cumplían su cometido, como las de la pandemia.
Cada foto tiene detrás de sí una historia, igual que cada nube.
Cuanta magia nos regalan las nubes con su forma, donde cada cual observa figuras diferentes.
ResponderEliminarFeliz jueves.
Un abrazo Tracy.
Así es, nos hacen soñar.
EliminarBesos
Es cierto, cada nube. cada foto tiene historia. Muy emotiva tu escrito de hoy. Abrazos
ResponderEliminarIgual pasa con los regalos, con los recuerdos de los viajes...
EliminarCon las nubes veo mil cosas... y habrá quién sólo vea nubes...
ResponderEliminarSuele pasar con las nubes y con todo.
EliminarEs total el parecido, yo también soy aficionada y busco formas en ellas. Incluso, en el verano de este sur tan asfixiante las busco; no hay ni una con tanta calor, las echo de menos. Abrazos.
ResponderEliminarPues sigue buscando, porque hay, aunque son ráfadas o muy pequeñas, pero las hay.
EliminarA mí también me inspiran los dibujos que veo en las nubes, y como se deshacen y forman otros... tu historia de la nadadora es alentadora... y muy bonita, es amor en tu mirada...
ResponderEliminarUn abrazo Tracy
Muy bueno, me quedo que detrás de cada nube hay una historia, eso sin duda. Un beso feliz puente.
ResponderEliminarPor eso te atraen e intentas fijarlas en una foto. Al menos eso creo yo, pero ya sabes que estoy medio pirá.
EliminarHay nubes inspiradoras y otras que matan (cumulonimbus incus).
ResponderEliminar¿Cuales son esas?
EliminarDos fotografías impresionantes, Tracy! Y yo también tengo esa debilidad, contemplar las nubes cuando el viento les va dando forma y deforma, es una maravilla, un abrazote!
ResponderEliminarEl ser hermanas se tiene que notar en algo.
EliminarHola Tracy, muchas gracias por participar de nuestra propuesta, me encantó tu relato, coincidimos mucho. Desde chica también me encanta observar las nubes y encontrarles semejanzas con animales, cosas y fotografiarlas.
ResponderEliminarCreo que ha sido un buen pasatiempo ese que hiciste en pandemia, no solo armaste un buen archivo fotográfico, sino que el tiempo se te hizo más llevadero, tu fotografía me encanto.
Un abrazo grande.
PATRICIA F.
A decir que las haga de exposición, todas , pero las guardo de recuerdo.
ResponderEliminarQue bello relato Tracy! Las nubes nos llevan a fantasear e imaginar historias, emociones... Me gusta fotografiar mucho los atardeceres cuando el sol se mezcla con las nubes y hacen un espectáculo de pinceladas... También suelo buscarle forma a las nubes jajaja Besos por ahí!
ResponderEliminarGracias Mari, por comentar y hacerme saber que tú eres tan romántica como yo, jajaja
EliminarQué imaginación tienes.
ResponderEliminarJajaja
EliminarUn cometido bello y entrañable, Tracy. Has hecho un relato dentro de otro y has construido un recuerdo que no suele ser común y es el de una experiencia tranquila, relajada, sin la prisa que atenaza en todo momento a este mundo donde cada vez es más complicado encontrar instantes de verdadera paz. Ese sosiego es lo que he querido mostrar también en la historia que cuento en mi aportación a este reto.
ResponderEliminarGracias por compartirlo.
Un abrazo.
Pues sí hay que recurrir a la Naturaleza para obtener la paz, pero sólo cuando está de buen humor, porque si rstá de malas... Ya estamos viendo los resultados, aunque mucha culpa tenemos los humanos.
EliminarNo me extraña que estés atenta a las nubes, Tracy...Eres muy amiga de la luna, mágica y romántica...Asi que tu relato le viene de maravilla a esa mujer nube, que sigue nadando en el aire. Digamos que tu creatividad está muy viva y la inspiración te llega desde todos los puntos cardinales...je,je.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz noviembre, amiga.
Soy muy observadora de la Naturaleza que está a mi alcance, me extasío contemplándola, aunque a veces me asusta y me preguntó si no seremos nosotros los culpables de algunas de las catástrofes que nos asolan. Espero que no Noviembre enderece su trayectoria y nos sea amable a todos
EliminarUna hermosa imagen que definen las nubes como la silueta de una mujer. Me gustó que compartieras ese momento que te sucedió y que permanece en tu recuerdo. Un abrazo
ResponderEliminarLa vida está hecha de momentos maravillosos dignos de ser compartidos.
EliminarUn besazo
Las nubes, vigorosa fuente de inspiración para las almas sensibles y soñadoras. Muy atinada tu forma de entretenerte, observando y retratandolas. Un abrazo, Tracy
ResponderEliminarSobre todo durante el encierro de la pandemia me sirvió de mucho. Era un aliciente.
EliminarPensaba al ver la imagen en una mujer con alas. Cuando contaste el relato que habías escrito, me gustó que tu nadadora saliera volando.
ResponderEliminarYo también busco formas en las nubes.
Me hiciste recordar una canción de El Jose que termina diciendo:
"Voy a inventarme un camino
Para dar más importancia
A la forma de las nubes que hacen corta la distancia"
Si no lo conoces, te lo recomiendo
https://youtu.be/l-lD_Oza8rw?si=l49aSrErUbvueTiJ
Besos
Soy admiradora de El José, ese granaino que me gusta su.música, su forma de cantar, sus letras y que muchas veces lo he traído a mis sábados musicales, pero está canción no la había escuchado, me la guardo para ponerla cualquier sábado de estos.
EliminarInfinitas gracias por traérmela
Me gusta imaginar entre las nubes. Tienen tantas formas es fácil volar entre ellas
ResponderEliminarUn abrazo.
Tú eres de las mías.
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