Se encuentra en Ceuta y es uno de sus edificios más emblemáticos.
Su construcción se debe al arquitecto valenciano Cortina Pérez y fue construida por los hermanos Ricardo y Francisco Cerni, este último fue alcalde de la ciudad desde finales del XIX a los primeros años del siglo XX y mandó poner las iniciales de su hermano y suyas (RFC) en un anagrama situado en su fachada, me imagino que para que pasara a la historia quienes habían sido sus promotores.
En la parte superior del edificio se sitúan los cuatro dragones que le dan nombre, hechos por el escultor Antonio Romero Vallejo y que se colocaron en 2006, ya que los originales se quitaron en tiempos de la II República Española, cuando el edificio fue alquilado al Casino de Marruecos por sus propietarios.
Es interesante recorrer su historia:
Primero fue vivienda de la familia Cerni y cuando murió Francisco la propiedad pasó a los hijos de su hermano Ricardo.
Tras la Guerra Civil la alquiló Falange Española para poner en ella sus oficinas.
En 1946 se vendió a las misioneras de la Inmaculada Concepción que la reformaron interiormente para hacer un colegio, dejando algunas habitaciones para que se hospedara el Obispo cuando visitara la ciudad.
Más tarde las monjas alquilaron la planta baja a la Caja de Ahorros y Monte de Piedad ceutí , excepto la parte que ya estaba alquilada a la Sociedad Benhamú.
Es interesante recorrer su historia:
Primero fue vivienda de la familia Cerni y cuando murió Francisco la propiedad pasó a los hijos de su hermano Ricardo.
Tras la Guerra Civil la alquiló Falange Española para poner en ella sus oficinas.
En 1946 se vendió a las misioneras de la Inmaculada Concepción que la reformaron interiormente para hacer un colegio, dejando algunas habitaciones para que se hospedara el Obispo cuando visitara la ciudad.
Más tarde las monjas alquilaron la planta baja a la Caja de Ahorros y Monte de Piedad ceutí , excepto la parte que ya estaba alquilada a la Sociedad Benhamú.
Cuando las misioneras decidieron vender el inmueble se lo ofrecieron a los inquilinos que había, la Caja renunció y la compró el Sr. Benhamú que la rehabilitó en su totalidad.
Haciendo este recorrido se pueden sacar muchas conclusiones de los poderes facticos de la época, que prácticamente no han variado. Incluso se están relacionando los adornos arquitectónicos del edificio: hojas de acacia, dragones o bóvedas, que son muy significativos en la masonería, con la pertenencia de los Cerni a la Logía Ceutí nº 50.
Haciendo este recorrido se pueden sacar muchas conclusiones de los poderes facticos de la época, que prácticamente no han variado. Incluso se están relacionando los adornos arquitectónicos del edificio: hojas de acacia, dragones o bóvedas, que son muy significativos en la masonería, con la pertenencia de los Cerni a la Logía Ceutí nº 50.
¡¡¡Ay si sus muros hablaran!!!
interesante
ResponderEliminarMás por lo que guarda, que por lo que se sabe de ella.
EliminarMuy buena explicación, los edificios tienen vida propia y cuando la conocemos los miramos con otros ojos. Abrazo
ResponderEliminarA veces tienen más vida que las personas.
EliminarAbrazos.
Si hablaran sus muros muchas de sus historias darían yuyu...
ResponderEliminarDesde luego la casa es curiosa...
Besos y buen sábado.
Pues sí, ya dan yuyu sin que hablen... Imagínate...
EliminarDragones y falange.
ResponderEliminarBichos juntos.
Besos.
... las monjas, el obispo, la masonería... ¡Cóctel potente!
EliminarBesos
¡Qué interesante, Tracy, la historia de la casa, que se aprecia magnífica!.
ResponderEliminarUn gusto poder volver a visitarte y leerte, amiga. Un abrazo. María
Bienvenida María, celebro que te haya interesado este entrada
EliminarAbrazos.
Acerté! Espero que me regales una cerveza y no un té :P
ResponderEliminarEs muy bonito el edificio y muy interesante lo que cuentas. Estuve en Ceuta hace un porrón de años.
Besos.
Si estuviste hace un porrón de años, no estarían puestos aún los dragones ¿no?
EliminarMe encantó tu reportaje
ResponderEliminargracias ''
Me pareció interesante y por eso le dediqué la entrada.
EliminarNo me des las gracias, en todo caso yo a ti por comentar.
Un besote.
Y Franco odiando a los masones porque a el no le dejaron entrar...jajaja
ResponderEliminarBesos y salud
Es para inspirar ficciones épicas, con dragones.
ResponderEliminarInteresante lo que contás.
Saludos.
No dudo que de ahí sacarías tú una novela, jejejeje
EliminarAhh, con razón la hinchazón, los dueños eran sonsones.
ResponderEliminarBesos
Un magnífico reportaje sobre una construcción espectacular.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Josep.
EliminarUn abrazo también para ti.
No he tenido que buscar pues lo dices de entrada pero esos dragones tienen que ser impresionantes... Destacan tanto en la fachada que da la impresión de estar moviéndose en ella.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Es verdad le dan movilidad a la estructura, parece como si quisiera echar a volar.
Eliminarsolo de ver la foto me trajo recuerdos a una serie animada de años atrás llamada "Gargolas" o tambien a los Cazafantasmas
ResponderEliminarsaludos
No las he visto nunca, pero puede se ser, si tú lo dices. Algo fantasmagórico ¿no?
EliminarLa verdad es que es muy interesante lo que has dicho.
ResponderEliminarBesos.
Si por lo menos sirvió para que salieras de tu letargo, me alegro.
EliminarBesitos.
Un descubrimiento, Tracy, ya que nunca había oído hablar de este espectacular edificio.
ResponderEliminarLa masonería siempre me ha intrigado, quizá porque cuando era niña se asociaba a "los malos" de los que se inventaron miles de leyendas a cual más extravagantes y sangrientas, sólo porque no cayeron bajo el yugo del Generalísimo.
Un beso y feliz y caluroso verano, que lo disfrutes mucho, de corazón.
Lo de las hordas judeo-masónicas ¿no?
EliminarConviene conocer la historia para deshacer conceptos que nos metieron a machaca martillo.
Besos
Desde luego la casa es preciosa, pero con los dragones es más que impactante, y a mi que me encantan estos bichos.....besos.
ResponderEliminarPara gustos... colores, jejejeje Lo digo por lo de los dragones.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu entrada, entre otras cosas porque no conocía el edificio. Buen trabajo.
ResponderEliminarInteresantísimo! me ha gustado mucho participar y leer tu relato.
ResponderEliminarBeso y gracias por pasar por mi casa
Pues pasé unas cuantas veces por allí y apenas la recuerdo, ya ves. Estuve en Ceuta como muchos, por aquello del servicio militar obligatorio, hace 33 años y cada vez que salía lo hacía calle Real adelante.
ResponderEliminarMe ha gustado conocer la historia y si la reconocí fue gracias a los comentarios de los otros compañeros.
Besos.
Bonito edificio. Ya no se construyen edificios bonitos.
ResponderEliminarGracias por esta crónica. Si voy a Ceuta,
ResponderEliminarme acordaré de ti.
Besos
Que bonito!!! Hermosos detalles..
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