pero transformarlos con detalles o desenlaces que los reciclen. Esta es la original idea que se le ha ocurrido a Inma Blanco , quien nos conduce esta semana.
Estos cuentos reciclados los podéis leer aquí
EL flaustista de Hamelín
Había una vez una pequeña aldea en la que la población había ido menguando a causa de la emigración, quedando reducida a un pequeño número de familias cuya juventud había quedado sepultada en la horizontalidad de aquellos campos que labraban con mucho esfuerzo día tras día.
Hijos y nietos venían a ver a sus mayores los fines de semana y aprovechaban para llevarse verduras y hortalizas cuyo sabor no se podía encontrar en los supermercados de la gran ciudad vertical.
El rojo de los tomates, la tersura de los pimientos, el sabor de las patatas, el tamaño de las coles y el verdor de las espinacas y acelgas, hacían el placer de pequeños y mayores, por no hablar de los árboles frutales que adornaban los huertas de los aldeanos que se sentían orgullosos de que sus vástagos alabaran la calidad de sus productos y pudieran llevarse parte del esfuerzo que ellos hacían para mantener aquellas tierras a pleno rendimiento.
Un año hicieron su aparición por los campos aledaños a la aldea una plaga de ratas, que acabaron con la cosecha de los pobres campesinos y pensaron en Eufrasio que en las noches veraniegas con su armónica eclipsaba a perros y gatos del lugar, le dirían que probara a tocarla en las eras por si se volvía a repetir el cuento del flautista de Hamelin Y se reprodujo.
Las ratas siguieron la música y Eufrasio las condujo a una enorme cueva de la que taparon la entrada una vez que estaban dentro y allí se quedaron para siempre.
La noticia salió en todos los medios de comunicación y todos los políticos que estaban en campaña electoral, fueron a visitar la aldea, interrumpiendo la tranquilidad de sus habitantes, que hartos de escuchar mentira tras mentira , decidieron poner a Eufrasio a tocar la armónica como cierre del mitin al que habían ido los cabezas de lista de cada partido y esperar a ver qué pasaba.
Con las primeras notas de música, los políticos se levantaron de sus sillas y se dirigieron en fila al autocar que los había llevado a la aldea y no se supo más de ellos.
Desde ese día a Eufrasio no cesan de avisarle de todos los países del mundo, para que toque la armónica. Se dice que le han llamado incluso, desde EEUU para que se desplace hasta allí y toque ante Donald Trump.
Ya nos enteraremos de lo que suceda.
Donald Trump le robará la armónica.
ResponderEliminarBesos.
Jajaja. La esperanza es lo último que se pierde.
EliminarSiempre que tenemos una cosa buena, los extranjeros la quieren y se la llevan, con lo bien que me ha caído Eufrasio. (el nombre no tiene desperdicio) Un saltibrinco
ResponderEliminarNo se lo llevan, nos lo piden prestado para solucionar algunos problemillas que le durjan
EliminarInteresante actualización del cuento.
ResponderEliminarAviso: Tocar delante del Trump ese es muy peligroso.
Pero seguro que intenta hacerlo.
EliminarJa ja ja... Habrá que estar atentos a las noticias.
ResponderEliminarEufrasio debe tener muuuuuuuuuuuuuucho trabajo!!
Feliz fin de semana
La verdad es que todo el mundo lo reclama,
EliminarGenial, como siempre y con un sentido del humor que espero conserves por siempre.
ResponderEliminarLas mañanas con tus escritos, suelen ser mas luminosas.
Besos
Te agradezco mucho las cosas tan bonitas que me dices: Muchísimas gracias
EliminarEn su día tuve que trabajar sobre lo que hay detrás de los cuentos, dios lo que hay, los autores de cuentos para niños lo que tienen es muy mala leche.
ResponderEliminarSaludos
yo no he trabajado en eso pero he asistido a talleres donde se han desmontado esos cuentos y desde luego tienen tela.
EliminarY tal vez la original historia, la del flautista de Hamelin habría terminado así, si le hubieran pagado lo prometido. A este nuevo flautista tal vez no le hayan pagado, pero fue respetado por librarlos de la plaga. Y por eso, siguió ejerciendo su música, con ese resultado.
ResponderEliminarBien contado.
El se conforma con librar a la gente de las personas que le molestan.
EliminarUn beso
Interesante versión del cuento, pero a diferencia del cuento original, más que una moraleja contiene un ferviente deseo de que sea realidad...
ResponderEliminar(A mi también se me ocurrió una alternativa a un cuento, más simplona, claro...)
Sí señor, un deseo ferviente.
EliminarUn abrzzo
Me declaro admiradora de Eufrasio ¡¡
ResponderEliminarbesos artista¡
¡Toma!TY yo.
Eliminar¡No le iba a faltar trabajo, no!
ResponderEliminar:)
<<<<desde luego que no.
EliminarA mí me da que hay mucho sordo metido en política.
ResponderEliminarSimpática esta actualización del cuento.
Saludos.
Gracias.
EliminarVaya con el tio de la armónica!!! jajaja!!! Me ahs hecho llorar a base de lagrimas de risa. SE te ocurre cada cosa!!! Buén fin de semana amigai
ResponderEliminarMe alegro infinito.
EliminarTodavía veo las ratas...
ResponderEliminarBesos.
Buen relato.
Gracias por compartirlo.
De nada, por favor.
EliminarNo me extraña nada que lo avisen. Y que no paren ...
ResponderEliminar¡Estupendo, Eufrasio!
Un beso fuerte, Tracy.
Eufrasio es genial.
EliminarPor Dios, que ni se le ocurra tocar para Trump!
ResponderEliminarBesos y buen finde, Tracy.
¿Y eso?
Eliminarjejejeje Unos cuantos harían falta...
ResponderEliminarBesos y salud
Buenísimo. Me encanta tu sentido del humor. Lástima que sería imposible erradicar toda la maldad porque detrás de unos llegan otros y nunca acabaríamos.
ResponderEliminarUn beso.
Pues Eufrasio tendría que trabajar sin descanso.
EliminarEsas sí que son ratas que merecen ser erradicadas!...las otras, pobres, son parte del equilibrio natural de nuestro planeta jejeje.
ResponderEliminarUn abrazo
Llevas razón pero son muy asquerosas.
EliminarTrabajo no le va a faltar.
ResponderEliminarA ver si puede con Trump...
; )
Besos y buen finde.
Él no va a tener paro, no.
EliminarY yo que pensaba que se llevaría a los políticos a otra cueva y que luego la sellarían para que todos nos quedaramos tranquilitos, esta claro que los cuentos, cuentos son.....besos.
ResponderEliminarNo sabemos donde fueron a parar, pero el hecho es que no vovieron más.
EliminarGran final Tracy. Igual sin políticos funcionaríamos mejor.
ResponderEliminarNo sé, no sé.
Bueno, con políticos pero que sean honestos.
Yo creo que sí.
EliminarQué bueno Tracy! Tan original como siempre!Jajaja
ResponderEliminarUn beso
Celebro que te haya gustado.
EliminarMe parece estupendo, pero yo lo que quiero, es que hables alguna vez de Drácula.
ResponderEliminarBesos.
¿Y eso?
EliminarEse señor no me gusta nada.
Jajaja, te lo digo, porque el genero de terror me gusta, no por otra cosa.
ResponderEliminarBesos.
Pero a mí no me gusta nada.
EliminarPObre Eufrasio va a llegar en mal momento a EEUU jajaja. Buen cuento Tracy me encanto. Un beso
ResponderEliminar¿En mal momento? ¡En el mejor momento!
EliminarUn crack Eufrasio. Eso llevémosle de gira a Washington, jajá.
ResponderEliminarMuy bueno Tracy. Un beso.
Coincides conmigo, ¡qué bien!
Eliminarajjajajajajjaja ay muchachitaa..que talento para sacar sonrisas....Me he divertido con este relato tuyo...besoss..y feliz comienzo del mejor mes del año..
ResponderEliminarMe alegro que te hayas divertido, ¡qué bien!
Eliminar:-D Me da a mi que solo con los líderes no bastaría...
ResponderEliminarUn saludo.
Pues nada todos los militantes.
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